En una operación conjunta entre el Ejército Nacional de Colombia, la Policía Nacional y el Ejército de Ecuador, fueron destruidos dos megalaboratorios utilizados para la producción de clorhidrato de cocaína en el departamento de Nariño. Estas infraestructuras ilegales, ubicadas en zonas rurales de los municipios de Cumbal y El Tambo, representaban un importante centro de procesamiento de estupefacientes.
El primer operativo se llevó a cabo en la vereda Tiuquer, municipio de Cumbal, donde las fuerzas de seguridad lograron localizar una infraestructura clandestina de gran escala. En el lugar, se incautaron cerca de dos toneladas y media de clorhidrato de cocaína en proceso de secado, 530 kilogramos de pasta base de coca, 220 galones de la sustancia en solución, 2.200 galones de insumos líquidos y 80 kilogramos de insumos sólidos. Además, se halló maquinaria especializada y herramientas utilizadas en la producción de alcaloides, las cuales fueron destruidas cumpliendo con estrictos protocolos de seguridad.
En una acción posterior en zona rural del municipio de El Tambo, las autoridades ubicaron otro centro de producción de narcóticos. Allí fueron decomisadas más de dos toneladas de clorhidrato de cocaína, junto con 7.700 galones de insumos líquidos y 130 kilogramos de insumos sólidos, materiales que también fueron destruidos en el marco de la operación.
De acuerdo con información oficial, estos laboratorios tenían la capacidad de producir hasta una tonelada y media de estupefacientes al mes. Su eliminación supone un impacto significativo en las finanzas de los grupos ilegales dedicados al narcotráfico, con pérdidas estimadas en 13 millones de dólares. Además, se evitó la comercialización de aproximadamente 2,7 millones de dosis de la droga en el mercado ilegal internacional.
El Ministerio de Defensa resaltó la importancia de la cooperación entre Colombia y Ecuador para el combate contra el crimen organizado transnacional. Asimismo, las autoridades reafirmaron su compromiso de continuar con operaciones dirigidas a debilitar las economías ilícitas que afectan la seguridad y estabilidad de la región.
El Ejército Nacional destacó que estas acciones forman parte de una estrategia más amplia para frenar el narcotráfico y sus efectos en las comunidades locales. En ese sentido, se mantienen activos los operativos en distintos puntos del suroccidente colombiano con el fin de seguir afectando las estructuras criminales responsables de estas actividades ilícitas.
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