Nuevamente se encendieron las alarmas por la crítica situación por la que atraviesa el sector salud del distrito de Medellín. Según la información obtenida por IFMNOTICIAS.COM, la crisis ha golpeado no solo a Metrosalud, al Hospital General y al Hospital Infantil Concejo de Medellín, sino también a la Secretaría de Salud.
Las denuncias conocidas por IFMNOTICIAS.COM dan cuenta de «un daño incalculable e irreparable» por cuenta de unas «autoridades y organismos de control cómplices con extremos niveles de corrupción rampante», asociados, dicen los denunciantes, a redes criminales y políticos corruptos.
Sobre el particular, el exconcejal y columnista de IFMNOTICIAS.COM, Bernardo Alejandro Guerra Hoyos, aseguró que mientras Daniel Quintero y la Alcaldía de Medellín asumen con dineros públicos el ser anfitriones del cónclave del Pacto Histórico, hoy, en el Hospital Infantil Concejo de Medellín, crece la lista de faltantes en insumos y medicamentos.
En cuanto a los insumos faltantes, el exconcejal Guerra indica que no hay catéteres, líneas arteriales, gasas estériles, inhalocámaras y sueros, entre otros. Así mismo, la entidad hospitalaria no dispone, a la fecha, de adrenalina, salbutamol, bromuro de ipratropio, sulzinc, hartan, suero mixto y solución salina, lo que se convierte en una amenaza para la salud de los medellinenses, y especialmente de los más vulnerables, pues muchos de esos faltantes son indispensables para atender adecuadamente las enfermedades respiratorias que están en pleno pico en la ciudad.
De hecho, llama la atención que la mayoría de faltantes no son costosos y, sin embargo, no están disponibles para el sistema público de salud de Medellín. Un ejemplo claro son las inhalocámaras pediátricas, cuyo precio al detal oscila entre los siete mil y los diez mil pesos. En cuanto a las inhalocámaras para adultos, el costo de una unidad está, en el mercado virtual, entre $5 850 y $22 000.
Ante la falta de insumos, el personal sanitario de la red pública de Medellín ha tenido que recurrir a la creatividad, asumiendo la elaboración de inhalocámaras improvisadas, como lo denunció hace algunas horas el exconcejal Guerra Hoyos.
En todo este saqueo, aseguran las fuentes, pierden los pacientes y el talento humano de la salud en Medellín. Lo peor, sostienen, es que la crisis no tiene solución a la vista y, por lo tanto, no se observa una rectificación del rumbo en el corto plazo.
Además, en los testimonios ofrecidos a IFMNOTICIAS.COM, se asegura que «el tema no es solo en salud: el saqueo es generalizado, pues la orden es robar, robar y robar». Por tal motivo, sostienen las fuentes, cada año de la rapiña de Daniel Quintero Calle en el cargo, significa un retroceso de cuatro años, pues, además, «completarán el asalto con la toma total de EPM y sus filiales, así como la toma del Metro y las adjudicaciones de Hidroituango y del Metro de la 80».
