La reunión sobre el futuro del Metro de Bogotá fue cancelada a causa del viaje de Gustavo Petro a la Argentina para participar en la cumbre de la Celac.
Petro y Claudia López habían programado la reunión por la circunstancia de los cambios que desea realizar el presidente al proyecto que ya está contratado y en ejecución.
Había una expectativa sobre la definición de si la primera línea del Metro será elevada o subterránea y las implicaciones que se pueden dar al cambiar el proyecto actual.
En la Comisión Accidental del Metro, donde están concejales y congresistas, se percibe molesta y ha citado a una reunión extraordinaria por las versiones que circulan de que Petro ya se reunió con el consorcio chino adjudicatario del contrato de la primera línea, para hacer modificaciones al proyecto, sin importar los billonarios sobrecostos, las demoras y los avances que ya se tienen.
Sería muy grave que, por debajo de la mesa, Petro hubiera llamado a los chinos, sin invitar a la alcaldesa de la ciudad y estar acordando algo solo por su capricho presidencial, condenando a Bogotá a que se dilate el proyecto del Metro de la ciudad.
