Varios hechos que pueden considerarse coincidentes, se comienzan a unir en un especie de rompecabezas, luego de que IFMNOTICIAS revelara en exclusiva, la clandestina reunión del hermano del presidente, Juan Fernando Petro, en un restaurante de la ciudad con los 12 alcaldes de los municipios de Urabá; y que impulsaría la idea, de que efectivamente en el Urabá Antioqueño, se estaría confeccionando un proceso de negociación con el Clan del Golfo o Autodefensas Gaitanistas de Colombia.
Precisamente ayer, y como primera coincidencia, mientras se conocía la reunión clandestina, desconocida y desautorizada por el Gobierno Nacional, IFMONOTICIAS publicaba un Informe Confidencial, en el que señalaba que según los voceros de las AGC, sí estarían negociando con el Gobierno, pese a los desmentidos del Presidente.
Y es que llama la atención, como segunda “coincidencia” que justo hoy, cuando IFMNOTICIAS, publica el audio de los primeros minutos de esta reunión, queda claro que uno de los temas directos a tratar, fue el de estos municipios de la subregión de Urabá, en el marco de la Paz Total.
Textualmente en la reunión se dijo: “Los alcaldes están motivados con esta reunión que se da por usted doctor Petro, porque nuestras esperanzas están basadas en la Paz Total, en el slogan de campaña de Gobierno del doctor Petro, y esa esperanza se refleja en un voto popular que tuvo la región en cabeza de cada uno de estos gobernantes, para que ese anhelado sueño de desarrollo se convierta en una realidad“.
Para nadie es secreto que el modo de proceder el señor Juan Fernando Petro, ha sido tradicionalmente el de tejer agendas paralelas “no oficiales” pero con todo el tinte de que estas lo sean, al punto que fue al margen de esa oficialidad y de manera oscura, que se tejió La Paz Total desde el llamado Pacto de la Picota; algo que termina siendo una tercera coincidencia.
Si sumamos coincidencias, encontramos una cuarta y es que la sede base, lugar de origen y de desarrollo de sus grandes actividades y en donde las AGC o Clan del Golfo se han sentido cómodas en su actuar, es precisamente el Urabá Antioqueño. De allí fue Alias Otoniel y toda la cúpula organizativa familiar que la comenzó y es al rededor de esta zona que mantienen su accionar, como lo es Chocó, el norte y nordeste de Antioquia y el occidente de Antioquia; zonas todas cercanas al Urabá.
Como si fuera poco y en una quinta coincidencia, hay que recordar que Juan Fernando Petro, siempre se ha movido en ONG´s y temas relacionados con diálogos con bandas criminales, como las que hizo al margen de las autoridades de Medellín en la Cárcel de Máxima Seguridad de Itagüí en donde buscó que los jefes de las bandas fueran voceros de Paz. Petro ha utilizado el tema de paz y derechos humanos para ir generando agenda paralela que termina saliendo a primer nivel cuando ya está lista y se convierte en política del Gobierno.
En términos coloquiales, suele decirse que “un hecho es coincidencia; pero mas de uno ya es un plan”. En ese orden de ideas, no es difícil inferir que algo se está tramando el hermano del presidente y que seguramente, lo que se está perfilando es un proceso de paz con el Clan del Golfo o Autodefensas Gaitanistas de Colombia, dando razón a los voceros de esa organización criminal.
El solo hecho que Juan Fernando Petro haya realizado una reunión clandestina en la que se habló con los alcaldes de los 12 municipios del Urabá, en el marco de la Paz Total, como uno de los temas principales que se trató en la reunión, lleva a pensar que el Gobierno Petro, está dando los pasos para nuevamente, pasar por encima de las autoridades locales, y contar con el beneplácito de los alcaldes para crear las mesas de diálogo en la región.
Consultado al respecto, el Representante a la Cámara, Hernán Cadavid, señaló que “hay dos suspicacias: la primera la de un hombre (Juan Fernando Petro) que se mezcla con procederes de negociación oculta con bandas criminales y otra la imposibilidad de conocer la agenda oculta con reuniones clandestinas con autoridades municipales; agendas que no pueden ser ocultas y deben ser transparentes, pues detrás, como suele ser el proceder de Fernando Petro, siempre hay una negociación bajo la mesa que no se le cuenta al país”.
Hernán Cadavid, no descarta la posibilidad de que un proceso de este tipo se esté fabricando bajo la mesa y de espaldas a una discusión de país y señala que “en este caso, el reproche no solo es para el señor Petro, sino para los alcaldes que accedieron a reunirse con él sin contar con la lógica administrativa de respetar al Gobernador de Antioquia y que se hayan prestado para esta reunión”.
Es claro que las coincidencias de tal magnitud no existen y, conociendo la aversión del Presidente Gustavo Petro por Antioquia, tiene mayor asiento el pensar en que el impacto es debilitar a las autoridades regionales en temas de Paz, relegando al Gobernador y a la institucionalidad, como también lo es, en un juego a tres bandas, buscar con esta oportunidad, impulsar la idea de diseccionar el departamento creando de sus subregiones otros con autonomía administrativa.
