Zulma Guzmán Castro, ciudadana colombiana vinculada al caso de las menores fallecidas tras ingerir alimentos contaminados con talio en Bogotá, se encuentra retenida en el Reino Unido bajo la aplicación de la Ley de Salud Mental. La mujer permanece en una clínica de Londres luego de ser rescatada del río Támesis, en un hecho que las autoridades británicas manejan como un posible intento de suicidio.
De acuerdo con información conocida por fuentes locales, Guzmán está consciente y bajo observación médica permanente, conocida como suicide watch, medida que impide cualquier contacto externo mientras los especialistas evalúan su estado psicológico.
En este contexto, las autoridades británicas han señalado que no se podrán adoptar decisiones judiciales o administrativas hasta que la paciente sea considerada médicamente estable.
La situación ha motivado gestiones diplomáticas por parte del Estado colombiano y según informó, la embajadora Laura Sarabia ha sostenido reuniones con autoridades del Reino Unido, quienes han reiterado que la legislación inglesa prioriza la atención en salud mental antes de cualquier actuación judicial. Bajo ese marco, Guzmán aún no ha designado abogado, pese a que la ley le reconoce ese derecho.
La empresaria fue localizada esta semana tras una llamada de emergencia recibida poco antes de las siete de la mañana, que alertaba sobre una mujer en aparente estado de angustia en las inmediaciones del puente de Battersea, al occidente de Londres. La Unidad de Policía Marítima de la Policía Metropolitana participó en el rescate y posterior traslado a un centro hospitalario, donde se confirmó que no presentaba lesiones de gravedad.
Guzmán Castro es requerida por la justicia colombiana por su presunta responsabilidad en el envío de un postre de frambuesas cubiertas de chocolate contaminadas con talio, entregado el 3 de abril en un apartamento del norte de Bogotá.
Según la Fiscalía, el alimento fue enviado mediante una empresa de mensajería y consumido horas después por varias personas, entre ellas dos niñas que fallecieron tras ser atendidas en la Fundación Santa Fe. Otra menor resultó con secuelas permanentes y un joven de 21 años también fue hospitalizado.
Los análisis forenses establecieron que el talio fue introducido de forma deliberada en las frambuesas. Tras los hechos, Guzmán salió del país el 13 de abril y, según el rastreo de las autoridades, pasó por Argentina, Brasil y España antes de llegar al Reino Unido. Durante ese periodo permaneció prófuga.
Las autoridades colombianas activaron mecanismos de cooperación judicial internacional y solicitaron su captura con fines de extradición. Un juez del Westminster Magistrates’ Court emitió una orden de arresto que se hará efectiva una vez la mujer esté en condiciones de comparecer. Aunque se difundió una alerta roja de Interpol, esta fue suspendida de manera temporal mientras se ajustan los trámites entre ambos países.
Mientras estuvo fuera del país, Guzmán negó las acusaciones y afirmó que se trataba de un conflicto personal relacionado con una supuesta relación sentimental. No obstante, las autoridades colombianas mantienen el proceso judicial activo y a la espera de que el Reino Unido defina su situación médica para avanzar en las etapas legales correspondientes.
