El ingeniero y colaborador de IFMNOTICIAS.COM Joel Moreno, fue visionario cuando apenas se estaba construyendo el soterrado de Parques del Río en el año 2015.
En una columna publicada por el periódico El Colombiano, el ingeniero Moreno ya daba cuenta de las fallas en el diseño y advertía que a la primera lluvia fuerte, el soterrado se inundaría.
Ante la situación presentada en la tarde y noche de ayer, transcribimos para nuestros lectores, las reflexiones que en su momento, expresaba el ingeniero Joel Moreno.
PARQUES DEL RÍO SE INUNDARÁ
– ¿Y hacia dónde desviarían, mientras se excavan las “grandes brechas para enterrar las vías”, más de 130 mil vehículos que a diario moviliza la economía metropolitana?
– ¿.Y cómo se lograría el vertimiento de todas las quebradas y alcantarillados que están hoy casi al mismo nivel del río?
– ¿Y hacia dónde trasladarían las estaciones y líneas del Sistema Metro y férreo, líneas de transmisión de alta tensión, etc.?
– ¿Y hacia dónde descargarían los gases, producto de la combustión de los vehículos que circularían por las vías deprimidas?
– ¿Se ha realizado un estudio previo, una valoración sobre los efectos que por contaminación ambiental en las zonas adyacentes al río se producirían?
– ¿Se ha cuantificado el costo de la destrucción y reconstrucción del Plan Maestro de Aguas Residuales construido durante décadas por las EPM?
– ¿Y hacia dónde se trasladarían la redes de energía de alta tensión, conducción y distribución de agua potable que hoy abastecen la ciudad?
– ¿Se ha estudiado y previsto resolver las posibles inundaciones que las crecientes del río podrían ocasionar en las vías deprimidas?
– ¿Y sí se han realizado los estudios de ingeniería y diseños para determinar los verdaderos costos del proyecto, acaso se ha establecido su factibilidad económica sobre los costos y beneficios económicos, sociales y ambientales del proyecto?
Las anteriores, fueron algunas de las preguntas que hacia el mes de noviembre del 2013 le enviamos al Concejo de Medellín, en la sesión donde se presentó el proyecto de presupuesto del 2014.
Y la respuesta fue la asignación de una partida para financiar la primera etapa de Parques del Río, cuya construcción ya está en curso, desafiando las leyes que toda obra pública está obligada a cumplir para su ejecución, como si el alcalde estuviera por encima de la ley.
Una obra que además de no contar con la licencia ambiental, es la negación a las prioridades que exige el crecimiento del parque automotor en materia de infraestructura para la movilidad y a pocas semanas de haberse iniciado, empiezan a comprobarse los presagios y evidentes las improvisaciones: las congestiones vehiculares agravaron el problema de la movilidad, particularmente en la Troncal Occidental que atraviesa el área metropolitana.
Gases y residuos producidos por los motores se concentrarán en los “soterrados”, como ocurre en el deprimido de la Avenida Oriental por no disponer de los respectivos túneles de ventilación.
Parques del Río no considera la continuidad del transporte férreo de carga, ni el Tren de Cercanías para atender la movilidad intermunicipal y tampoco aparece el sistema metro en las márgenes del río.
Pero más preocupante aún, es el riesgo que por inundaciones estarán expuestos los denominados “soterrados”. El canal del río hoy no tiene la capacidad hidráulica para sortear las crecientes máximas, estimadas en más de 800 metros cúbicos por segundo; pues ya hay antecedentes del comportamiento en deprimidos como el de San Juan para acceder a la denominada autopista o en el de la Terminal del Norte recientemente.
