Los internautas, en las redes sociales, no han dejado pasar la manera como el presidente electo dio su primer discurso después de conocer los resultados de las elecciones.
En su particular manera, el nuevo presidente dejó ver en su mensaje de celebración, ideas que sin duda afectaran el futuro de Colombia.
La palabra cambio fue una constante en el mensaje de Petro: «Este día indudablemente es histórico, es historia lo que estamos escribiendo en este momento para Colombia, para América Latina, para el mundo, una historia nueva porque indudablemente aquí lo que ha ocurrido hoy, con esos 11 millones de electores y electoras, es un cambio».
Aclaró que el cambio no es de odios ni de revanchismos: «No es un cambio para construir más odios, no es un cambio para profundizar el sectarismo en la sociedad colombiana», invitando a aquellas personas que votaron por Rodolfo Hernández y todas las corrientes políticas a una Casa de Nariño que según dijo, tendrá las puertas abiertas para dialogar sobre los intereses nacionales.
Una sugerencia que levanto polémica fue la invitación que hizo al Fiscal General de la Nación a que libre a los capturados por los hechos vandálicos durante el paro nacional del pasado año, «Cuántos jóvenes encadenados, tratados como bandoleros, simplemente porque tenían esperanza, simplemente porque tenían amor (…) Yo le solicito al fiscal general de la nación, libere a nuestra juventud».
La polémica propuesta fue calificada como una injerencia del ejecutivo en el poder judicial, y fue respondida de inmediato por Francisco Barbosa, fiscal general, «Si el presidente electo quiere buscar la liberación de jóvenes que cometieron delitos, debe pedirle el favor al Congreso que cambie la ley y no al fiscal general»
De igual manera le solicitó a la procuradora Margarita Cabello, la restitución de los alcaldes suspendidos por participación en política refiriéndose, sin nombrarlo, a Daniel Quintero.
«Si me preguntan para qué es un acuerdo nacional, les diría para construir los máximos consensos que nos permitan las reformas que hagan que la vida de la familia pueda ser una vida mejor, que el viejo y la vieja puedan tener una pensión, que el joven y la joven puedan tener una universidad, que el niño y la niña puedan tener la leche y el pan, y la carne no sea un artículo de lujo, que la familia pueda construirse más fuerte. El gran acuerdo nacional es construir la paz», afirmó Petro, refiriéndose a la necesidad de un pacto nacional, abriendo la posibilidad de diálogos con todos los grupos irregulares que actúan en el territorio nacional.
Indicó que desarrollará el capitalismo, aunque no le gusta, pero como una manera de superar la premodernidad y el feudalismo, e invito a a la unión latinoamericana y un dialogo con los Estados Unidos sobre transición energética: «Llegó el momento de sentarnos con el gobierno de Estados Unidos. Le propongo a todos los gobiernos de América sentarnos a dialogar para acelerar los pasos de la transición energética».
Haciendo referencia a que después de tres intentos de candidatura a la Presidencia, por fin lo logró, afirmó, «aquí somos una demostración de que la paz es posible en Colombia, de que los sueños se pueden volver realidad, los sueños de justicia, los sueños de libertad».
Después de 41 minutos donde repartió agradecimientos, Petro terminó su intervención con la frase, «me llamo Gustavo Petro y soy su presidente. Los quiero mucho, te quiero mucho Colombia».