Absolutamente constantes son las denuncias que los lideres de la izquierda colombiana presentan a lo opinión pública a cada momento.
Las “águilas negras” son los protagonistas de un recurrente envió de comunicados donde se consignan amenazas de muerte contra la integridad de políticos como, Iván Cepeda, Aida Abella, Francia Márquez, María José Pizarro, Gustavo Petro, Daniel Quintero, Carlos Lozada, Rodrigo Londoño, Daniel Coronell entre otros.
Pero curiosamente en época electoral se incrementan está clase de denuncias por parte de los candidatos, en la campaña de 2018 Gustavo Bolívar transmitió en directo el supuesto atentado a bala que sufrió el candidato Petro en la ciudad de Cúcuta, después se comprobó que fue una piedra que alguien no simpatizante lanzo a su camioneta blindada.
En su candidatura a la Alcaldía de Bogotá, Claudia López también recibió su respectiva carta por parte de las águilas negras.
Daniel Quintero despertó la solidaridad de la gente cuando en su campaña por la Alcaldía de Medellín, denuncio que lo querían asesinar recibiendo mensajes amenazantes, sumado a seguimientos y vigilancia de personas sospechosas, su compañera salió en su defensa motivando un sentimiento popular de acompañamiento y rechazo a las amenazas.
Francia Márquez el pasado mes de abril denuncio que fue victima de las águilas negras que la habían amenazado por tercera vez.
En todas estas amenazas aparece un común denominador, “las águilas negras”, pero ¿Quiénes son?
Lo único que en concreto que podemos saber es que tienen un muy buen sistema de correspondencia, pero son un fantasma que están pero no están, ante las autoridades no son un GAO, Grupo Armado Organizado, no hay miembros de la organización capturados y no hay evidencia concreta de que existan, aparentemente solo están en los panfletos y el papel aguanta todo.
El caso mas reciente de amenazas y supuestos atentados, lo protagoniza el candidato de Pacto Histórico, que debió cancelar su gira por el eje cafetero porque habían sicarios pagados para asesinarlo.
La denuncia se conoció debido a que el equipo de seguridad del candidato en una investigación interna, determinó el peligro que afrontaría Petro, es bueno aclarar que una vez se dio a la luz publica la noticia, el Gobierno Nacional realizó un barrido por todos los sistemas de inteligencia de los organismos de seguridad y afirmaron desconocer algún tipo de amenaza o peligro para el candidato Petro.
En la campaña afirman que el grupo criminal “la cordillera” seria el encargado de realizar la acción, dicho banda según el dosier de las autoridades, está conformada por unos 50 hombres armados al mando de un sujeto de 45 años alias “Don A” y que su actuar criminal es controlar el microtráfico en la zona de Pereira, Dosquebradas y la Virginia en el departamento de Risaralda.
Gustavo Petro como es costumbre siempre culpa al Uribismo de todo y no podría ser este caso la excepción, en su cuenta de Twitter indicó.
Lo que si es cierto es que el supuesto atentado ha sido una excelente estrategia publicitaria para la campaña del Pacto Histórico, los medios, las redes y los colombianos llevamos tres días hablando de Petro y su atentado del que no se han conocido pruebas concretas, pero si distrajo la vista de asuntos importantes como la denuncia de la infiltración a la campaña de Federico Gutiérrez, es como cuando un famoso desea volver al primer plano y que hablen de el…protagoniza un escandalo.
El asunto es tan gaseoso que a dado hasta para divertidos memes.
