Este lunes, 21 de octubre, campesinos de los departamentos de Boyacá, Santander y Norte de Santander iniciaron un paro indefinido, bloqueando varias vías estratégicas en protesta por las políticas que prohíben las actividades agrícolas y ganaderas en zonas de páramo.
Los manifestantes exigen la protección de sus derechos a continuar con estas actividades, fundamentales para su subsistencia.
Los bloqueos se concentraron en vías clave como la ruta Bucaramanga-San Gil, Pamplona-Cúcuta, Duitama-Tunja y Rionegro-San Alberto, afectando gravemente el tránsito en regiones estratégicas del país.
Según la Asociación de Campesinos Defensa Páramo de Berlín, solo se habilitará un corredor humanitario para el paso de servicios esenciales.
Protesta por la defensa de la soberanía alimentaria
El paro surge en respuesta a normativas como el decreto 044, que limita severamente la posibilidad de desarrollar actividades agropecuarias en áreas de páramo como Almorzadero, Santurbán-Berlín y la Sierra Nevada del Cocuy.
Los campesinos aseguran que estas regulaciones ponen en riesgo su supervivencia económica, ya que dependen de la agricultura y la ganadería en estas zonas.
Edwin Blanco, representante de Asojuntas de Santander, afirmó que las restricciones impuestas por el gobierno condenan a los agricultores al desplazamiento, ya que no se han ofrecido alternativas viables.
«No estamos en contra del cuidado del medio ambiente, pero no podemos aceptar que nuestras tierras sean restringidas sin soluciones que nos permitan subsistir», indicó.
Impacto en la movilidad y el diálogo con el gobierno
El bloqueo de las vías ha generado un caos en la movilidad de las regiones afectadas, paralizando el transporte y preocupando a los sectores productivos. Las rutas que conectan a Bucaramanga, Cúcuta, Bogotá y la costa Atlántica están seriamente afectadas, lo que ha motivado llamados de las autoridades para retomar las negociaciones y evitar más perjuicios.
Desde la Gobernación de Santander, el secretario del Interior, Óscar Hernández, pidió al Gobierno nacional abrir un diálogo para encontrar un equilibrio entre la protección de los páramos y la continuidad de las actividades agropecuarias.
Además, se propuso la creación de una mesa de diálogo liderada por el viceministro para el Diálogo Social, Daniel Rondón.
Los campesinos, por su parte, exigen la intervención del Ministerio de Ambiente y la Agencia Nacional de Restitución de Tierras, advirtiendo que muchos podrían perder sus tierras si no se legalizan sus predios.
Aunque ya se han realizado conversaciones con algunas comunidades, los manifestantes aseguran que no han recibido respuestas satisfactorias.
La movilización de los agricultores coincide con el inicio de la COP16, un evento internacional sobre cambio climático que se desarrolla en Colombia. Los campesinos buscan atraer la atención de la comunidad internacional y presionar al Gobierno para que atienda sus demandas.
