Un grupo de 86 organizaciones sociales que operan programas del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) manifestó su preocupación ante el incremento del 3% en los contratos de aporte anunciado por el gobierno nacional para 2025. Según un comunicado emitido por estas entidades, este ajuste no compensa los efectos de la inflación, el aumento del salario mínimo ni otros factores económicos que afectan los costos de operación.
“Este incremento no nos permitirá cubrir los gastos asociados al servicio que tendrán un incremento a partir del 1° de enero de 2025”, advirtieron las organizaciones, que trabajan principalmente con poblaciones de los estratos 1, 2 y 3 en todo el país.
Entre los puntos destacados, las entidades señalaron que el aumento propuesto no se alinea con:
• El incremento del salario mínimo para 2025, que será del 9.54%.
• La proyección del IPC para 2024, que según el DANE cerrará en 5.2%.
• El aumento del 23% en el subsidio de transporte.
• Los costos adicionales derivados de la reducción de una hora en la jornada laboral semanal, medida implementada desde hace dos años, que obliga a contratar más personal sin un reconocimiento presupuestal por parte del Gobierno.
Las organizaciones también señalaron que estas condiciones podrían agravar la disminución de la cobertura en los servicios prestados a la población atendida por el ICBF. Según sus estimaciones, la cobertura ha venido reduciéndose un 10% en los últimos años.
Ante este panorama, las entidades hicieron un llamado urgente al Gobierno Nacional y a las directivas del ICBF para abrir un espacio de concertación antes del 30 de diciembre, fecha límite para la firma de los contratos. “Esperamos que la voz de las organizaciones sociales pueda ser escuchada y de esta manera se potencie el trabajo en alianza entre el sector público y el tercer sector, en beneficio de la protección y bienestar de la primera infancia, la niñez, la juventud y las familias de Colombia”, señalaron.
Entre las organizaciones firmantes del comunicado se encuentran la Federación Antioqueña de ONG, la Fundación Michín (Bogotá), la Fundación Chiquitines (Cali) y la Fundación FESCO (Manizales), entre otras.