Frente a la demanda de la señora Sara Otero en contra del concejal de Medellín por el Centro Democrático, Julio Enrique González Villa, la Juez 14 Administrativa del Circuito de Medellín anuló en primera instancia el nombramiento del corporado como vicepresidente primero.
Tras notificarse de esta decisión, González Villa manifestó que respeta las decisiones de la juez aunque no comparte sus apreciaciones y expresó que apelará la decisión para ir a una segunda instancia.
«Hay una sentencia de primera instancia declarando la nulidad de mi nombramiento o de mi elección como vicepresidente primero. Vamos para el segundo tiempo, ¿cuál es el segundo tiempo? La apelación, la segunda instancia», anunció el concejal.
Pero, ¿por qué surge esta demanda de nulidad de la elección como vicepresidente primero de González? Según le explicó a IFMNOTICIAS.COM, la demanda no viene de parte de ningún concejal, sino de una ciudadana de nombre Sara Otero, a quien, según el concejal, no conoce nadie y quien durante el proceso actuó de forma muy confusa.
«Esa señora le estaba haciendo el mandado a alguien. No sé si se lo estaba haciendo a Nataly o a Paulina o a Lina García”, cuestionó el concejal.
La demandante reclamó que la vicepresidencia primera le correspondía a una mujer, en este caso del partido Centro Democrático por el estatuto de la oposición, es decir, a María Paulina Aguinaga, Nataly Vélez o Lina Marcela García; quienes a su vez, ya venían defendiendo la Ley 1909 de 2018 que en su artículo 18 estipula la equidad de género en las organizaciones políticas.
«Aquí pasó una cosa muy distinta, resulta que estas mujeres del Centro Democrático, esto es, Paulina Aguinaga, Lina García y Nataly Vélez, querían era la presidencia del Concejo, no la vicepresidencia primera; y ellas se postularon fue para la presidencia”, explicó González.
Según el corporado, a las tres mujeres del Centro Democrático se les había sugerido que se postularan a la vicepresidencia primera, a lo que Paulina Aguinaga habría dicho textualmente que a «ella no le interesaban las migajas, que ella iba por el trozo fuerte del tema que era la Presidencia».
Con este argumento en firme, narra González, ellas habrían postulado para la presidencia a Aguinaga, desacatando incluso la directriz del partido de apoyar la candidatura única de Simón Molina para la presidencia del Concejo de Medellín. Pero fueron derrotadas porque solo hubo cuatro votos, los tres de ellas más el voto de Albert Corredor.
Tras la derrota de las mujeres en su aspiración a la presidencia de la Corporación, el siguiente voto correspondía a la vicepresidencia primera. En el acto alguien postuló a Julio Enrique González teniendo como resultado su elección por unanimidad.
«Es decir, de 21 concejales, 20 votaron afirmativamente por mí. Solo una persona dijo que votaba en blanco que era la concejal Dora Saldarriaga. Es decir, por mí votaron Nataly Vélez, Paulina Aguinaga y Lina García; por lo que es como absurdo lo que está pasando ahora», afirmó.
El segundo argumento con el que el concejal se defenderá en segunda instancia, tiene que ver con que el cargo es un derecho de la oposición y no un derecho para cualquiera. Según él, en el momento de la votación era evidente que las corporadas no representaban oposición para la administración municipal, por lo que no podían ejercer el cargo.
«¿Qué era evidente para todo el mundo? Para cuatro concejales del Centro Democrático (Sebastián López, Simón Molina, Alfredo Ramos y Julio González. Lo mismo que para Daniel Duque, Daniel Carvalho –quien en ese entonces estaba- y Luis Bernardo Vélez), era evidente que estas tres niñas, Nataly Vélez, Paulina Aguinaga y Lina García, no eran oposición porque nunca hicieron un debate de control político a Quintero después que el partido se declaró en oposición, porque en las intervenciones nunca atacaron a la administración de Daniel Quintero, porque todo el mundo sabía que tenían cuotas burocráticas en el municipio de Medellín. Entonces todo el mundo sabía que no eran oposición», aclaró.
Y añadió que «por esto es absurdo pensar que, si ellas no son oposición, puedan ocupar la vicepresidencia primera del concejo de Medellín que está reservada para la oposición».
Finalmente, el corporado expresó que una vez presentado el recurso de apelación e iniciado el proceso de segunda instancia ante el Tribunal Administrativo de Antioquia, espera que la sentencia sea favorable y afirmó que mientras esto suceda, continuará en el cargo como Vicepresidente Primero del Concejo de Medellín.
