Mientras en la Universidad de EAFIT el proceso de elección de la nueva rectora, Claudia Restrepo, se hizo en tiempo récord; la Universidad de Medellín continúa solicitando a la empresa cazatalentos Top Management, hojas de vida para analizar el posible candidato que se encargue de los destinos de la universidad.
Luego de las primeras cuatro hojas de vida reveladas por IFMNOTICIAS en los que se encontraban presentes personajes de la vida nacional y bajo el reto encargado por la Asamblea a la consiluatura de evitar el fantasma de la politización de la universidad, que la ha perseguido durante los últimos tiempos; se conoció que ya son por lo menos 10 nombres en la baraja sin que todavía se tenga definición.
Según trascendió, las últimas dos hojas de vida de candidatos, llegaron hace unos días a los escritorios de los miembros consiliarios, solo que lejos de el rastro político que se busca, los nombre llegados tienen directa relación con el mundo político antioqueño, con dos candidatos que, sin duda, les sobra méritos como también su estela política.
IFMNOTICIAS conoció que uno de los candidatos que se estudia en estas nuevas horas de vida, es Eugenio Prieto; hijo directo de la casa liberal en Antioquía y quien a sus 58 años, acumula una larga experiencia en lo público como quiera que fue senador y gobernador encargado Entre el 2002 al 2003, tras la muerte de Guillermo Gaviria y dejando el cargo a Aníbal Gaviria. Este contador público egresado de la Universidad, ha sido además diputado, gerente del IDEA, y del Área Metropolitana; en todos los cargos ha sobresalido por su buena gestión.
Pero para un importante sector de los egresados pertenecientes a la Asamblea de la Universidad de Medellín, el nombre de Prieto significa la continuidad del dominio del Partido Liberal sobre la universidad, un fantasma del que se ha querido alejar la historia y señalan que la llegada de Prieto, representaría volver a la sombra de un directorio político de esa casa Liberal en el claustro universitario.
El otro es Federico Restrepo, de la casa Fajardista, quien además se desempeñó como Director de Planeación del municipio Gerente de Empresas Públicas de Medellín, gerente de la campaña de Alonso Salazar y de las autopistas de la prosperidad en el gobierno de Juan Manuel Santos, como cuota del fajardismo. En el 1016, este ingeniero civil, fue candidato a la Gobernación de Antioquia por el movimiento Compromiso Ciudadano de Sergio Fajardo.
Las críticas que le hacen los egresamos de la Asamblea, están dirigidas a lo que denominan La intención de dominio que, al parecer, quiere ejercer el Fajardismo de la academia y algunos sectores importantes en el departamento. Señalan por ejemplo, qie ya ahora tienen a EAFIT con la nueva rectora y el Cesde así como a Comfama. Para ellos una eventual llegada de Restrepo, sería una conquista más, dentro del dominio de la academia en la educación superior, que bien podría ser empleada apuntar a la consolidación de la campaña presidencial de Sergio Fajardo para el 2022.
Estos dos nuevos nombres, al menos de cara a la comunidad educativa, si bien gozan de buena aceptación por sus credenciales y su pulcra vida política y social; dicen que no cumplirían las condiciones emanadas del espíritu de la Asamblea, como lo es el cambiar el chip de que la Universidad de Medellin alguna vez fue vista como un directorio político.
Es por eso que se interpreta del sentir de la base universitaria con voces de profesores empleados, estudiantes y egresados; que defienden la gestión de la actual rector César Guerra, quien al momento ha demostrado una excelente gestión enfrente de la universidad y desprovisto de cualquier interés político y qué proponen como el indicado para asumir la rectoría. Guerra, por fuera del estudio que adelanta la consiliatura es el nombre que menos resistencia genera entre la Asamblea y comunidad educativa y debería ser tenido en cuenta, dicen los egresados.
Por lo pronto, la tarea y el tiempo planteado por la Asamblea y confiada la consiliatura para la escogencia de un nuevo rector, comienza agotarse y deberá y las próximas semana, tomarse una decisión definitiva. A lo mejor al organismo supremo de gobierno de la Universidad, le viene bien escuchar esas voces.
