La Comisión Interamericana de Derechos Humanos, pidió al Estado colombiano tomar medidas urgentes para garantizar la seguridad de los líderes políticos y comunitarios en todo el país.
Esta solicitud se dio tras el asesinato del senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay, la CIDH expresó además su profundo pesar y condenó el hecho.
En un comunicado oficial, la CIDH advirtió que el crimen contra Uribe Turbay refleja la persistencia de la violencia política en Colombia, un fenómeno que continúa afectando a personas con liderazgo político, social y comunitario, así como a los partidos y a la sociedad en general. La Comisión alertó sobre las implicaciones que esta situación podría tener de cara al proceso electoral de 2026.
“La Comisión urge al Estado colombiano a actuar con diligencia para investigar, juzgar y sancionar este y otros actos de violencia”.
La CIDH enfatizó que el Estado debe proveer garantías efectivas de seguridad para quienes ejercen liderazgo político, en especial en contextos electorales o de alta polarización. Esto incluye tanto a figuras públicas como a líderes sociales y comunitarios, cuya integridad también se ve amenazada por la violencia persistente en distintas regiones del país.
El organismo internacional también hizo un llamado a reducir la confrontación y la polarización política, e instó a los actores nacionales a privilegiar el diálogo, la búsqueda de consensos y la implementación de soluciones efectivas a los desafíos del país, como parte del fortalecimiento del Estado Social de Derecho, consagrado en la Constitución de 1991 y en el Acuerdo de Paz firmado en 2016.