Una avioneta que transportaba turistas europeos se desplomó en el condado de Kenia, a unos 40 km del aeropuerto de Diani, mientras volaba hacia la Reserva Nacional del Masai Mara.
Una avioneta tipo Cessna 208B Grand Caravan, operada por la aerolínea keniana Mombasa Air Safari, se estrelló el martes 29 de octubre por la mañana en un área boscosa y montañosa del condado de Kwale, en la costa sur de Kenia, cuando realizaba un vuelo chárter desde Diani a la pista de aterrizaje de Kichwa Tembo, cercana a la Reserva Nacional del Masai Mara.
Las autoridades confirmaron la muerte de las 11 personas que iban a bordo de la aeronave, entre ellos 8 personas de nacionalidad húngara y dos alemanes, el piloto de nacionalidad keniana también falleció en el hecho según informaron las autoridades.
El accidente ocurrió en una zona de difícil acceso, a unos 40 km del aeropuerto de Diani, muy temprano a las 5:30 am, entre lluvia intensa y niebla, condiciones que podrían haber influido en el siniestro.
Testigos reportaron haber escuchado un fuerte estruendo, al tiempo que los equipos de rescate encontraron los restos del catastrófico accidente envueltos en llamas y restos humanos que no podían ser identificados sobre el terreno.
La aerolínea Mombasa Air Safari emitió un comunicado en el que lamentó la tragedia, aseguró que ha activado su equipo de respuesta a emergencias y ha estado cooperando con las autoridades kenianas en las investigaciones correspondientes para determinar cuál fue la causa del siniestro.
Por su parte, la Aviación Civil de Kenia indicó que inicialmente se informó de 12 personas a bordo, pero la cifra definitiva confirmada es de 11.
El vuelo habría despegado del aeropuerto de Ukunda (Diani Beach) y tenía previsto cubrir un trayecto de aproximadamente dos horas hasta la pista de aterrizaje de Kichwa Tembo, con dirección a la costa Masai Mara. Según se informó, el piloto habría despegado sin dar aviso a la torre de control.
El Masai Mara es uno de los parques más emblemáticos de Kenia y destino clave para visitantes internacionales, especialmente durante la migración anual de ñus.
La investigación del accidente fue declarada prioritaria por el gobierno, que desplegó equipos de forenses, expertos en aviación al sitio del siniestro. Hasta el momento, no se han presentado resultados oficiales sobre la causa del impacto, aunque se mencionan como factores posibles las condiciones meteorológicas adversas y la falta de comunicación entre el piloto y la torre de control tras el despegue.
