En una reciente entrevista, Sergio Fajardo, exalcalde de Medellín y exgobernador de Antioquia, dejó entrever que su participación en las elecciones presidenciales de 2026 es “altamente probable”.
A pesar de liderar las encuestas de intención de voto, el político aclaró que aún no se considera un candidato formal, aunque su figura se perfila como una de las más fuertes para la contienda.
Fajardo destacó que su actual enfoque político está basado en una permanente reivindicación de principios y valores éticos.
En este sentido, se mostró preocupado por la polarización que atraviesa Colombia y la necesidad urgente de un liderazgo que pueda convocar a todos los sectores del país, no solo a la izquierda, sino también a la derecha y al centro, con el fin de construir una unidad nacional.
Un 2026 marcado por la polarización
“El 2026 será el año más difícil que nos ha tocado en Colombia. Serán unas elecciones muy polarizadas”, afirmó Fajardo, quien aseguró que, ante esta compleja situación, los colombianos no deben caer en la tentación de elegir los extremos.
En su opinión, el próximo gobierno debe ser capaz de convocar a todos los sectores y ofrecer soluciones que trasciendan la división política actual.
Uno de los temas que Fajardo tocó fue la figura de Armando Benedetti, quien representa, según él, una política contraria a los valores éticos que defiende. Fajardo ha mantenido una postura firme durante su carrera de no comprometer sus principios, lo que ha sido uno de los pilares de su propuesta política.
Preparado para el desafío
El exgobernador de Antioquia se mostró convencido de que su experiencia en la administración pública, tanto como Alcalde de Medellín como Gobernador, lo ha preparado para asumir la complejidad del liderazgo nacional. “Mi recorrido ha sido largo, pero me ha dado la claridad y la firmeza de no apartarme de los principios que siempre he defendido”, afirmó.
Aunque no descartó ni confirmó su candidatura en 2026, Fajardo dejó claro que está abierto a la posibilidad, un camino que, según él, es “altamente probable”. La incertidumbre sobre su participación en la carrera presidencial de 2026 sigue siendo uno de los temas que más interés genera entre sus seguidores y detractores.
