En una carta enviada al presidente de la República, el senador David Luna solicitó la renuncia inmediata del director del Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (INVIMA), Francisco Rossi, por comentarios que, según él, vulneran el derecho fundamental a la salud de los colombianos. El reclamo de Luna se centra en unas declaraciones de Rossi durante el II Congreso de Enfermedades Raras de Latinoamérica y el Caribe, en las que el director argumentó que la demora en la aprobación de medicamentos e innovaciones en Colombia se debe, en gran parte, a que “son muy caros”.
Para el senador Luna, este tipo de afirmaciones resultan inaceptables y contradicen los principios de equidad y justicia social. “La salud no debe ser vista exclusivamente como un bien de consumo sujeto a los vaivenes del mercado”, expuso Luna en su carta, enfatizando que los derechos a la vida y a una vida digna, consagrados en la Constitución, deben prevalecer por encima de cualquier consideración económica. En su misiva, Luna criticó que el director del INVIMA posicione los costos como una barrera para la disponibilidad de tratamientos, particularmente en el caso de los medicamentos huérfanos, que son cruciales para pacientes con enfermedades raras y crónicas.
El senador también señaló que la posición de Rossi constituye una extralimitación de sus funciones, dado que el INVIMA no tiene la competencia de regular precios, sino de garantizar la seguridad y eficacia de los tratamientos. “El rol del INVIMA es velar por la calidad de los medicamentos, no condicionar su aprobación a su valor en el mercado”, manifestó Luna. Según el legislador, los criterios de costo no deberían interferir en las decisiones sobre el acceso a tratamientos innovadores, ya que este tipo de posturas ignoran las necesidades de pacientes que dependen de estos medicamentos para mejorar su calidad de vida.
La solicitud de Luna refleja su preocupación por el impacto directo que la postura del director del INVIMA tiene sobre la población afectada por enfermedades graves, que muchas veces requieren medicamentos costosos y difíciles de conseguir en el país. El senador cuestionó la coherencia de las declaraciones de Rossi con la visión del Gobierno de una “Colombia, potencia mundial de la vida”, destacando que estas afirmaciones contradicen el objetivo de un sistema de salud justo e incluyente que respalde a los pacientes sin importar su condición económica.
En su carta, el senador afirmó que la gestión de Rossi es incompatible con los principios fundamentales que deben guiar el sistema de salud en Colombia. Hizo un llamado al presidente para que actúe de forma contundente, subrayando que negar el acceso a tecnologías que pueden mejorar la vida de los colombianos resulta inaceptable y poco ético. “La salud y el bienestar de nuestros ciudadanos están por encima de la ideología”, aseveró Luna.
Luna concluyó su carta con un mensaje de confianza en que el presidente tomará las medidas adecuadas para asegurar que los derechos de los pacientes no se vean limitados por barreras económicas. A su juicio, garantizar el acceso a tratamientos médicos innovadores es una responsabilidad del Estado, especialmente para quienes padecen enfermedades raras y crónicas.