José Alejandro Cheyne García, rector de la Universidad del Rosario, ha sido desvinculado de su cargo. Esta decisión se produce después de que un grupo de 819 egresados de Jurisprudencia firmara una carta pidiendo su renuncia.
La carta, que fue publicada en las redes sociales, expresaba la preocupación de los egresados por la gestión de Cheyne y pedía que se garantizara la salida a “la crisis sin afectar la autonomía universitaria”. Además, convocaron a una asamblea para construir un mejor gobierno universitario.
La petición de los egresados se sumó a otras cartas que han tenido impacto en la comunidad universitaria y que hacen la misma petición. Una fue del Colegio de Abogados Rosaristas y otra la de los profesores de carrera de la Facultad de Jurisprudencia.
A pesar de las voces que han alertado de una situación financiera crítica en la Universidad, el rector Cheyne había dado en diferentes intervenciones un parte de tranquilidad. Sin embargo, la presión de la comunidad universitaria ha llevado a la Consiliatura de la Universidad a tomar la decisión de desvincular a Cheyne.
Sin mucho preámbulo, la universidad se pronunció con un breve comunicado en el que informaba la decisión tomada
“Nos permitimos informar que la Consiliatura del Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario ha determinado la desvinculación del doctor JOSÉ ALEJANDRO CHEYNE GARCÍA, como Rector de la Universidad del Rosario, a partir de la fecha.
De acuerdo con lo establecido en las Constituciones ante la vacancia presentada, ocupará la Rectoría el Vicerrector, doctor GUSTAVO ADOLFO QUINTERO HERNÁNDEZ, quien convocará a elección de Rector para el resto del periodo, a la mayor brevedad”, puntualiza.
A medida que la Universidad del Rosario se enfrenta a este cambio de liderazgo, la comunidad académica y la opinión pública estarán observando de cerca cómo se maneja la transición y qué medidas se toman para abordar las preocupaciones planteadas.
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