Los bloqueos viales en el departamento de Boyacá, derivados del paro indefinido de mineros y campesinos, mantienen retenidos más de 500.000 litros de leche cruda, según confirmó la Asociación Colombiana de Procesadores de Leche (Asoleche).
La situación genera preocupación en el sector lácteo por el impacto que podría tener sobre la cadena de suministro a nivel nacional.
La presidenta ejecutiva de Asoleche, Ana María Gómez Montes, explicó que Boyacá representa una de las principales cuencas lecheras del país, con un volumen promedio de acopio de 700.000 litros diarios. Con la imposibilidad de trasladar la leche hacia las plantas procesadoras en Cundinamarca y otras regiones, se ha generado una acumulación que ya supera el medio millón de litros en tanques de acopio y vehículos.
El gremio señaló que, de continuar los bloqueos, se suspendería la recolección de leche en la zona, ya que los centros de enfriamiento se encuentran al límite de su capacidad. Esta situación compromete directamente el sustento de miles de productores rurales que dependen de la venta diaria para sostener a sus familias.
Los bloqueos, que se presentan en corredores como Ventaquemada y Paipa, hacen parte de una protesta que exige al Gobierno Nacional atención a un pliego de 10 puntos por parte de comunidades mineras y campesinas. La líder minera Sandra Bernal sostuvo que la movilización no se relaciona con minería ilegal ni daños ambientales, y aseguró que el paro se mantendrá hasta obtener respuestas concretas.
Frente al panorama, Asoleche solicitó garantías mínimas para permitir la circulación de vehículos que transportan alimentos esenciales. Según la organización, si no se permite la recolección y transformación de la leche, se tendrán que utilizar reservas existentes o buscar fuentes alternativas de suministro, lo que podría derivar en desabastecimiento en los puntos de venta.
Además de los efectos en el sector lácteo, se advierte que los perjuicios económicos serán significativos para toda la cadena, desde los pequeños productores hasta las industrias procesadoras.
El gremio reiteró su llamado a que se autorice el paso de los camiones recolectores mientras continúan los diálogos entre el Gobierno y los manifestantes.