Por José Alejandro Pérez Monsalve
Porsche revela en el Salón del Automóvil de Los Angeles la versión más radical de su modelo Cayman y la primera, además de los 911, que tiene el mérito de llevar las insignias RS en su nombre.
Se trata del Porsche Cayman GT4 RS, una verdadera bestia para circular en la calle. El modelo está dotado con el motor bóxer atmosférico que la marca monta en el 911 GT3 y en la versión de carreras 911 GT3 Cup. Sube hasta las 9.000 revoluciones y al compararse con su hermano de línea, el 718 Cayman GT4, ofrece un extra de potencia de 80 caballos para llegar a los 500 caballos, con un par motor de 450 Nm.
Estas cifras son gestionadas con una caja de cambios de doble embrague PDK de cortas relaciones lo que permite administrar las marchas de manera muy rápida y eficiente para poder desarrollar todas las características dinámicas del vehículo. Y no son pocas, ya que al probarse en el difícil Circuito Norte de Nurburgring este modelo logró un tiempo de 7 minutos y 9 segundos, bajando el cronómetro en cerca de 23 segundos sobre el tiempo logrado por el Cayman 718 GT4.
Otra de las características que complementa el diseño de este modelo para lograr su máximo desempeño es la construcción ligera, con un peso de poco más de 1.400 kilogramos y liberado de todos los accesorios que la marca considera superfluos para no lastrar su desempeño.
Su alerón trasero, un bajo despegue del piso, un difusor delantero que puede tener diferentes tipos de ajuste, así como un nuevo diseño del labio en el alerón delantero, son otros detalles desarrollados para darle el máximo desempeño a este modelo.
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