El presidente Gustavo Petro designó a Andrés Idárraga Franco, quien actualmente se desempeña como secretario de Transparencia de la Presidencia, como Ministro de Justicia y del Derecho encargado. Esta decisión se concretó luego de que el exmagistrado César Tulio Valencia declinara asumir el puesto de la cartera por motivos de salud.
Sobre el nuevo ministro, es importante destacar que es abogado de la Universidad Libre y magíster en Políticas Públicas por la Universidad Torcuato Di Tella. Su trayectoria abarca una amplia experiencia en el ámbito público: trabajó en la Secretaría de Hábitat durante la Alcaldía de Petro en Bogotá y también ocupó un cargo en la administración posterior de Claudia López.
Además de su paso por el gobierno, Idárraga ha colaborado con diversas organizaciones sociales, enfocándose en áreas como los derechos humanos, la promoción de la participación ciudadana y las políticas públicas. Un hecho relevante en su carrera fue su renuncia a la Dirección de Derechos Humanos de la Alcaldía de López en 2021, durante el Paro Nacional, pues, según se conoció, no compartió la forma en que la institucionalidad gestionó la protesta social.
Su posición más reciente fue la de secretario de Transparencia de la Presidencia, la cual ha ocupado desde 2022. Durante este periodo, Idárraga ha impulsado más de 1.000 denuncias de presunta corrupción, incluyendo casos relacionados con contratos irregulares y riesgos electorales, fortaleciendo la lucha contra estas prácticas desde la rama ejecutiva.
Aunque la Presidencia ha comunicado un encargo temporal, Idárraga ha manifestado que su designación “es de carácter indefinido”. Su llegada al ministerio ocurre en un momento crucial, pues la cartera debe impulsar la política criminal para enfrentar la creciente inseguridad y, al mismo tiempo, gestionar el debate sobre la posible convocatoria a una Asamblea Nacional Constituyente y la Ley de Sometimiento de organizaciones criminales.
La vacante en el Ministerio de Justicia se originó con la renuncia de Eduardo Montealegre el pasado 27 de octubre. Montealegre explicó en su carta que su dimisión se debía a una profunda indignación por la absolución del expresidente Álvaro Uribe Vélez por parte del Tribunal de Bogotá, un fallo que calificó de «prevaricato».
En su misiva, Montealegre tildó a Uribe de “criminal de guerra” y “corrupto”, anunciando su intención de acudir a tribunales internacionales para evitar que los actos que atribuye al expresidente queden impunes, razón que justificó su retiro del cargo. Tras esto, Valencia fue nombrado el 13 de noviembre, pero renunció días después, dejando el camino para la designación temporal de Idárraga.





