Acaban de pasar las elecciones regionales en Chile. Una coalición de partidos de derecha # ChileVamos, derrota a la izquierda en las elecciones de alcaldías, ganando la mayor cantidad de estas a nivel nacional, en las que se encuentra la capital, Santiago, donde derrotaron al Partido Comunista que tenía esa Alcaldía
El candidato Mario Desbordes, de # ChileVamos, se acaba de imponer con el 50.6% de los votos a la candidata oficial y actual alcaldesa comunista, Isaci Hassler, que obtuvo el 28.5% de la votación con más del 50% de los votos escrutados.
Desbordes fue ministro en Chile, en el segundo mandato de Sebastián Pińerq, es sin duda un golpe durísimo al actual presidente Gabriel Boric, al Partido Comunista chileno y a todos los partidos de izquierda; un viraje brusco a la derecha.
Gabriel Boric, un joven bipolar, sin academia, bisexual y exdrogadicto confesó qué llegó a la Presidencia de Chile después de la “explosión social “, que produjo esa inmensa destrucción por todo el país, y cuyo detonante fue el incremento de unos centavos en la tarifa del Metro de Santiago.
Boric, no pudo gobernar a Chile y desde su primer día de mandato, le mostró a los chilenos que se habían equivocado.
Su reforma de corte comunista soviético a la Constitución que eliminaba hasta la propiedad privada se hundió estrepitosamente y ninguna de las reformas suyas ha tenido éxito.
De hecho, faltando un poco más de un año para las elecciones presidenciales, Chile tiene ya tomada la decisión de elegir a José Antonio Kast Rist, a quien Boric derrotó en las pasadas elecciones y ya por una mayoría del 75% en las encuestas electorales.
Kast es un abogado y político Chileno de ascendencia Alemana,líder Repunlicano y exdiputado. Es un hombre de derecha, casado. con 7 hijos, y católico practicante.
Es de indicar que la antítesis de Gabriel Boric, cierra su mandato como un total fracaso del Partido Comunista y del Foro de São Paulo, y solo falta que se realicen las elecciones presidenciales para que Kast asuma la Presidencia de Chile.
En Colombia este viraje ya se dio, y los alcaldes de las ciudades capitales son de partidos y coaliciones enemigos del presidente Petro.
Galán en Bogotá, Fico en Medellín, Eder en Cali, Char en Barranquilla, Beltran en Bucaramanga y Turbay en Cartagena, son totalmente distantes a Petro.
De hecho, la izquierda perdió las Alcaldías más importantes del país que tenían Claudia López en Bogotá, Daniel Quintero en Medellín y Jorge Iván Ospina en Cali.
Sobre todo, Quintero y Ospina, de la línea Petrista, dejan en Medellín y Cali, una huella de desgobierno y corrupción que esas ciudades no conocían.
Petro al igual que Boric, llegó después de la “ explosión social”, cuyo detonante, fue el proyecto de reforma tributaria del ministro Carrasquilla en el gobierno de Iván Duque.
Ambas “explosiones sociales“, en Chile y Colombia, fueron ataques terroristas de la izquierda. “Terrorismo puro y duro“, como lo define la candidata María Fernanda Cabal.
Petro vive una situación muy parecida a la de Boric, ninguna de sus reformas ha podido tener éxito. Ha hecho daños por todas partes sobre todo en Salud y Pensiones donde las quiebras ya están a la vista.
Pero a diferencia de Chile, Colombia tiene a los grupos narcoterroristas y a la cocaína su combustible que les inyecta recursos y los ha fortalecido con la complicidad de Gustavo Petro en la toma de territorios y en legislación favorable.
Boric, se va y punto, con Petro no pasa lo mismo este ha montado una artificial distancia con todo el sector productivo y se ha inventado un «golpe de Estado», para poder “convocar a asambleas populares “y a todos estos terroristas amigos suyos a la toma del poder.
“Si me van a tumbar, vamos por del poder”, afirmó Petro recientemente y en Colombia no hay todavía una coalición de fuerzas políticas que lo enfrente con un solo candidato, en caso de dejar hacer las elecciones.
Las acusaciones y procesos en su contra y en la de su hijo Nicolás, por claras y probadas violaciones al régimen y a los topes electorales, tienen a Petro en una actitud delirante.
Los partidos políticos colombianos apenas empiezan a perfilar sus candidatos y además hay en circulación tres outsiders que marcan ya en las encuestas.
Vicky Dávila, Abelardo De la Espriella y Santiago Botero, serán jugadores en las próximas elecciones presidenciales.
La impopularidad de Boric y Petro es casi idéntica y se sitúa en el 80%, pero la diferencia es que Chile ya sabe quién reemplazará a Boric, y Colombia no sabe quién a Petro.
Y con un terrorismo rebobinado y fortalecido, y unas FFAA, en manos del régimen, tampoco sabemos si habrá elecciones presidenciales.
Esa la gran diferencia con Chile.