La llegada de migrantes de diferentes nacionalidades a Necoclí, Urabá antioqueño, tiene en alerta a las autoridades locales y nacionales porque en las últimas horas se ha desbordado la capacidad de atención a esta población en el municipio.
La preocupación crece porque en Necoclí nuevamente hay represamiento de personas que intentan llegar a Capurganá, en el Chocó, con el propósito de atravesar el peligroso Tapón del Darién para llegar a Panamá y seguir su viaje hacia Estados Unidos.
Preocupante incremento de migrantes enciende las alertas
El represamiento se ha agudizado por la suspensión del envío de lanchas desde Necoclí hacia Capurganá debido a diferentes tormentas que se han registrado en el Golfo de Urabá durante el fin de semana.
A esta problemática se suma el alza en los tiquetes de las lanchas que hace difícil la adquisición de un puesto que les permita a muchos que andan con lo necesario, continuar con su viaje.
No obstante, la Personería de Necoclí y el Procurador Regional se encuentran al frente del tema migratorio a nivel municipal, realizando monitoreos y vigilancia para garantizar los derechos humanos de las personas que migran por Necoclí de manera transitoria a diario.
«La Personería de Necoclí, Antioquia, articulando con los diferentes actores en la región y el municipio, la secretaría de turismo, el señor procurador regional, la empresa de aseo, en compañía de un concejal del municipio, acompañando el plan de contingencia por la problemática migratoria y buscando mitigar los impactos negativos al comercio turístico hotelero y de más poblaciones del territorio, vigilando que se garanticen los derechos humanos de locales y población migrante», informaron desde el Ministerio Público de Necoclí.
La Procuraduría General de la Nación lanzó alertas sobre esta situación
La grave crisis generada por los miles de migrantes represados en Necoclí, llevó a que la Procuraduría General de la Nación hiciera un llamado al gobierno nacional para que realice las coordinaciones bilaterales necesarias con el gobierno de Panamá con el fin de garantizar la seguridad e integridad de, por lo menos, 3 000 migrantes que hacen tránsito diariamente entre los municipios de Necoclí y Acandí o Capurganá.
La alerta se hizo extensiva para los gobernantes locales a quienes el Ministerio Público les solicitó realizar un estricto control sobre los servicios de transporte marítimo que se prestan en lanchas y evitar así episodios lamentables por sobrecupo o deficiencias en las medidas de seguridad.
«Estas personas, entre las que hay mujeres, niñas y niños, se encuentran en situación de vulnerabilidad debido a su condición de migrante, y en ese sentido, las autoridades municipales, departamentales y nacionales deben trabajar de manera armónica para garantizar sus derechos», aseguró el Procurador Delegado para los Derechos Humanos, Javier Sarmiento.
Esta es la situación que atraviesa hoy el municipio de Necoclí con la población migrante:
