El proceso judicial contra Nicolás Petro Burgos, hijo del presidente Gustavo Petro, avanzó este martes con una decisión clave. El juez del caso mantuvo como válida la principal evidencia del expediente el teléfono celular entregado por su exesposa, Day Vásquez, a la Fiscalía General de la Nación.
La defensa de Petro había solicitado la exclusión del dispositivo, argumentando irregularidades en la forma en que fue obtenido y posibles manipulaciones en su contenido.
No obstante, el juez determinó que el teléfono fue entregado de manera voluntaria y legal por Vásquez, quien desde 2023 coopera con las autoridades como testigo en el proceso. Con esta decisión, los mensajes, audios y documentos extraídos del celular podrán ser utilizados en el juicio por presunto enriquecimiento ilícito y lavado de activos.
El abogado defensor, Alejandro Carranza, sostuvo durante la audiencia que parte del material no tiene relación directa con los hechos investigados y que debía descartarse del expediente. Sin embargo, el juez señaló que cualquier duda sobre la autenticidad o el contexto de los mensajes tendrá que discutirse durante el juicio, no en la etapa preparatoria.
Los mensajes entre Nicolás Petro y Day Vásquez se convirtieron en una de las piezas centrales del proceso penal. En varios de ellos se mencionan sumas de dinero en efectivo y supuestos aportes irregulares a la campaña presidencial de 2022. En uno de los fragmentos citados por la Fiscalía, Petro solicita a Vásquez “mayor reserva” sobre el origen del dinero, elemento que será evaluado en la investigación sobre el presunto manejo de fondos no reportados.
La admisión de esta prueba también fortalece la nueva indagación abierta por la Procuraduría General de la Nación, que analiza presuntas irregularidades en la adjudicación de contratos de la Fundación Conciencia Social (Fucoso).
Según los registros, esta entidad habría recibido más de 3 mil millones de pesos durante el periodo en que Nicolás Petro se desempeñó como diputado del Atlántico. En el celular figuran conversaciones entre Petro, Vásquez y el representante de la fundación, Gustavo de la Ossa, sobre pagos, contratos y beneficios personales derivados de la contratación pública.
Mientras tanto, el desarrollo del juicio continúa en medio de tensiones entre la defensa y la Fiscalía. Carranza reiteró sus objeciones al principio de oportunidad concedido a Day Vásquez, a quien acusa de inconsistencias en su testimonio. Vásquez, por su parte, ha señalado que su colaboración permitió revelar hechos de corrupción y sostiene que la defensa busca retrasar el proceso.
En paralelo, la presencia de Nicolás Petro en las audiencias sigue en entredicho. El hijo del Presidente no pudo desplazarse desde Bogotá hasta Barranquilla para asistir de forma presencial a la diligencia de este martes, debido a las restricciones derivadas de su inclusión en la Lista Clinton del Departamento del Tesoro de Estados Unidos.
Su abogado explicó que, al estar en este registro, ninguna aerolínea ni entidad puede realizar transacciones comerciales a su nombre, lo que impidió la compra del tiquete aéreo. Según Carranza, esta situación ha dificultado su comparecencia, aunque la defensa gestiona alternativas para garantizar su participación en las próximas audiencias.
El proceso continúa bajo seguimiento judicial, mientras las pruebas digitales, encabezadas por el contenido del teléfono de Day Vásquez, se consolidan como la base principal del caso que enfrenta el hijo mayor del presidente Gustavo Petro.
