A finales de noviembre se llevó a cabo en Santa Marta la primera versión de los Juegos Centroamericanos y del Caribe del mar y Playa, con la participación de más de 36 países de la región donde los deportistas se enfrentaron en una variedad de deportes de playa y mar.
Hasta ahí, maravilloso, son este tipo de eventos lo que dinamizan la economía de las ciudades, sobre todo de aquellas, como Santa Marta, que viven del turismo, como su principal actividad económica, ya que con los deportistas vienen familias, entrenadores, periodistas, entre otros.
Sin embargo, al día siguiente de inauguradas las justas deportivas, a través de redes sociales comenzaron a moverse denuncias sobre el alto costo del montaje y la baja asistencia a los eventos, por lo que no estaría generando el impacto económico esperado.
Es por esto que IFMNOTICIAS.COM estuvo presente en la zona indagando y se encontró con gran parte de la playa de El Rodadero, una de las más turísticas de la ciudad, ocupada por andamiaje con los diferentes espacios deportivos, incluso ubicados al frente de hoteles, evitando el uso de dichos espacios para el turismo.
Por otro lado había una gran cantidad de policía en la zona, y efectivamente, como quedó plasmado en el vídeo realizado por este medio, las graderías de los escenarios deportivos en el transcurso de alguna competencia estaban realmente vacías, los turistas que se encontraban en la zona no estaban interesados en participar.
También había una tarima, con música, como para que propios y extraños disfrutaran en la playa y, literalmente, no había un alma, más allá de quien estaba manejando la música, es decir que ya llegando al final de las competencias, cuando se realizaron los videos, el impacto de las justas deportivas era casi nulo.
Ahora, esto puede suceder, y ser escenario de algún tipo de torneo no es garantía de que aumenten las visitas y el turismo, entre Santa Marta y el departamento se hizo una millonaria inversión de $8 mil millones según pudo establecer IFMNOTICIAS.COM, de los cuales solo el departamento puso $1,4 mil millones.
Esto contrasta con el altisimo nivel de desempleo, y el estado general de los servicios de salud en el departamento y en la ciudad de Santa Marta, que fue la que tuvo que poner la mayor partida presupuestal para el desarrollo de las justas deportivas.
Mientras eso sucedía, algunos barrios se inundaban por las lluvias, otros olían a alcantarilla por cuenta de los malos servicios públicos domiciliarios con los que cuenta la ciudad y los habitantes deben pagar el recibo de agua sin contar con el servicio de manera continua, ni de buena calidad.
