El excandidato presidencial, Sergio Fajardo, reaccionó ante los recientes escándalos de corrupción que salpican a altos funcionarios del Gobierno de Gustavo Petro.
Fajardo, quien ya había expresado sus críticas durante la campaña presidencial de 2022, aprovechó la coyuntura para reiterar una de las advertencias que hizo en su momento: las alianzas con sectores cuestionables traen consigo graves consecuencias.
Fajardo se refirió específicamente a los casos que involucran a Ricardo Roa, presidente de Ecopetrol, quien ha sido señalado de direccionar contratos en la hidroeléctrica de Urrá; Ricardo Bonilla, ministro de Hacienda, acusado de haber comprado congresistas, y Nicolás Alcocer, hijo adoptivo de Petro, quien también ha sido señalado por su cercanía con estos escándalos.
En su comentario, Fajardo expresó: “El trabalenguas de la corrupción en el gobierno de Petro. Cada nuevo escándalo les quita la máscara y reafirma lo que siempre hemos dicho: pagan para llegar, llegan a robar”.
Fajardo recordó que uno de los cuestionamientos más recurrentes durante la campaña de Petro fue su decisión de aliarse con sectores que previamente había criticado, incluidos partidos y figuras políticas que tenían antecedentes de prácticas corruptas.
Estas alianzas, según Fajardo, están pasando factura al presidente Petro y a su gobierno, sumergido ahora en un cúmulo de escándalos que parecen confirmar las advertencias que se hicieron en su contra.
En su trino hizo referencia al más reciente escándalo que involucra al ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, quien denunció ante la Fiscalía a Ricardo Roa y a Nicolás Alcocer por presuntamente haber influido en el proceso relacionado con la hidroeléctrica de Urrá.
Sin embargo, el propio Bonilla no está exento de controversia, ya que ha sido señalado por realizar presuntas transacciones burocráticas con congresistas, muchos de los cuales fueron parte del bloque político que respaldó a Petro en su campaña electoral, incluso desde sectores de la derecha.
A medida que los escándalos siguen afectando la imagen del gobierno, las palabras de Fajardo resuenan con fuerza. Fajardo parece confirmar que las críticas a las alianzas políticas de Petro no eran infundadas, y que las promesas de un cambio radical en la política colombiana podrían verse empañadas por los intereses de las mismas figuras que el presidente prometió transformar.