Hace pocas horas, se conoció que el exministro de Hacienda Ricardo Bonilla padeció una descompensación por baja presión arterial el 20 de diciembre, esto tras haber sido enviado a prisión preventiva por decisión del Tribunal Superior de Bogotá, que hace unos días ratificó la medida de aseguramiento intramural en su contra.
Esto, debido al escándalo de presunta corrupción en la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, UNGRD, en compañía del exministro Luis Fernando Velasco.
Según se supo, el estado de salud de Bonilla es de cuidado porque sufre además de presión arterial otras condiciones médicas, como se mencionó al inicio, por esto, tras haber sufrido una alteración, al tiempo que estaba en la prisión fue atendido por el personal médico mientras se hizo la solicitud para tener una valoración de carácter prioritario.
Por ahora, se sabe que el exministro continúa recluido en el Centro de Estudios Superiores de la Policía (CESPO) en Bogotá.
Sobre lo que pasó con Bonilla y su percance han surgido varias reacciones, el mismo presidente Petro aseguró que era un asesinato meter a Bonilla en una intramural cuando su condición de salud era extremadamente grave.
Añadió también que: “los dos exministros no están presos por haberse robado un solo peso, sino porque los acusan de llevar proyectos de los congresistas al ejecutivo”.
Sobre el tema, expuso además que en el caso de Bonilla ninguno de los proyectos que se señalan se cumplió porque, mencionó, “se cortó de tajo la financiación de esos proyectos al retirar a Olmedo de la UNGRD”, por lo cual, “nunca esos proyectos fueron defendidos por Bonilla, sino llevados por la asesora uribista que desde el gobierno de Duque siempre hacía eso”, declaró.
Por otra parte, el jefe de Estado informó que en el segundo caso, donde según la fiscalía correspondería a órdenes de Velasco, la inmensa mayoría de los proyectos fueron inscritos en el gobierno Duque, “en contravía de lo que ordené, que eran las vías en territorios de conflicto y con alta productividad en cultivos de hoja de coca para transformar económicamente esos territorios y pasar a economías lícitas y las vías campesinas en todo el país”, informó Petro.
Vale recordar que en cuanto a Invías, se adelantan investigaciones contra ambos exfuncionarios del gobierno por supuestos contratos en esta entidad, donde se habría dado una asignación irregular de contratos.
Sobre el estado de salud, de Bonilla, cabe recordar que hay preocupación también porque se conoció que, hace un par de semanas, sufrió un ataque isquémico cerebral y afasia motora, lo que, hace que requiera atención médica especial.
Este es un argumento común por parte de la defensa del exfuncionario que ha pedido considerar la condición médica de Bonilla expresando que a una edad de 76 años y con diferentes padecimientos, se deben proteger sus derechos fundamentales.
