En un operativo realizado en las últimas horas, la Procuraduría General de la Nación llevó a cabo una inspección en las instalaciones de la EPS Sanitas, con el objetivo de recopilar información técnica, administrativa y financiera que permita evaluar la situación actual de la entidad frente a las obligaciones en la prestación de servicios de salud.
Según el Ministerio Público, la visita tuvo como propósito principal establecer un diagnóstico sobre las crecientes dificultades que enfrentan los usuarios para acceder a servicios, dar continuidad a tratamientos y recibir atención oportuna, especialmente en casos relacionados con enfermedades de alto costo.
Durante la jornada, los delegados de la Procuraduría revisaron el estado de las rutas de atención, así como la suficiencia de la red de prestadores de servicios médicos contratados por Sanitas, con el fin de determinar si hay falencias que estén afectando a los afiliados.
La Procuraduría también analizó el estado financiero de la EPS, como parte de los factores que podrían estar influyendo en los problemas reportados por los usuarios. La información recopilada será verificada y contrastada con datos de otras entidades del sistema de salud.
El ente de control señaló que este tipo de inspecciones hacen parte de un seguimiento integral al sistema de salud, en medio del aumento de quejas, peticiones, tutelas y reclamos presentados por pacientes y asociaciones de usuarios en todo el país.