Esta semana se conoció la noticia de la caída de un muro de la fachada de la Iglesia de San Francisco, ubicada al frente de la gobernación del Valle del Cauca. Según los reportes del cuerpo de bomberos voluntarios de Cali, colapsó parte de la estructura de una pared, el techo se observaba arqueado y la fachada se cayó al piso.
Según el alcalde de la ciudad Jorge Iván Ospina, el colapso de la estructura se debió a la ola invernal que afecta por estos días al país y, particularmente, a esa región de Colombia. En esta línea, el secretario de Gestión del Riesgo de Cali, Rodrigo Zamorano, indicó que el desplome pudo provocarse por «unas humedades muy marcadas» en la estructura.
Sobre el incidente, en redes sociales algunos recordaron que hace una semana en el lugar estuvo el candidato presidencial Gustavo Petro, dirigiéndose ante un grupo de personas con motivo de la campaña electoral en plaza pública y atribuyeron el desplome de la fachada de la iglesia a supuestas retaliaciones de fuerzas oscuras en alusión a que Gustavo Petro y los del Pacto Histórico tienen, presuntamente, «un pacto con el diablo».
Si esta teoría fuera cierta, ¿se imaginan entonces cómo quedaría el país ante la presencia del candidato presidencial, si llegara a ganar?
