Las autoridades ambientales Corantioquia, Cornare y el Área Metropolitana del Valle de Aburrá confirmaron el avistamiento de un puma (Puma concolor) en zona rural del municipio de Montebello, en límites con el Oriente antioqueño. El registro fue posible gracias al monitoreo conjunto de estas entidades y a los reportes enviados por la comunidad.
Según los datos verificados, el ejemplar se encuentra en buen estado de salud y no representa una amenaza directa para las personas, siempre que se mantenga una convivencia responsable. Las autoridades aclaran que este puma no corresponde a un individuo liberado recientemente, sino que ha sido monitoreado desde 2023 mediante un rastreador satelital, en el marco de un proyecto de telemetría adelantado por el Área Metropolitana y el Instituto Humboldt.
El puma avistado forma parte de la fauna silvestre que habita en la región andina, y su presencia reafirma la riqueza biológica del territorio. No obstante, también evidencia las presiones que enfrentan estos animales debido a la pérdida de hábitat y a la reducción de sus presas naturales, como armadillos, venados, tatabras, cusumbos y mapaches, especies afectadas por la caza ilegal y la transformación de los ecosistemas.
Equipos técnicos de las autoridades ambientales ya visitaron las comunidades cercanas para brindar orientación y recomendaciones frente al comportamiento del animal. Entre las medidas sugeridas están:
- Proteger a las mascotas y animales de cría durante la noche, manteniéndolos en espacios cerrados o seguros.
- No dejar restos de comida en patios o zonas abiertas.
- En caso de ver al felino, conservar la calma, mantener la distancia y evitar cualquier intento de agresión o persecución.
- Implementar métodos de ahuyentamiento con sonidos, luces, olores fuertes o dispositivos que generen ruido durante la noche.
- Conducir con precaución para evitar el atropellamiento de fauna silvestre.
- Reforzar gallineros y acercar a la vivienda a los animales más vulnerables.
- Reportar cualquier situación de conflicto a las autoridades locales o ambientales.
Las entidades reiteraron el llamado a la ciudadanía para no ver al puma como una amenaza, sino como un indicador del equilibrio natural y de la necesidad urgente de proteger los ecosistemas y fomentar una convivencia armónica con la fauna silvestre.