Por: Marta Palacio
Cuando el comunismo se mete a una nación, todo el mundo lo deja sólo. Sucedió en Rusia, China, Corea del norte, Cuba, Venezuela, Nicaragua y está sucediendo en Colombia. Los dirigentes Comunistas hacen lo que quieran y aíslan su propia nación.
Sólo se logra derrotar desde adentro. Ellos lo saben, por eso desmantelan las instituciones de defensa, para que el pueblo no se pueda rebelar. La única solución viene desde el comienzo, antes de que nos diezmen las fortalezas democráticas.
Si nos dormimos, no encontraremos salida a esta situación.
Sólo las urnas, la decisión de cada ciudadano, nos permitirán revertir el inmenso daño que nos están haciendo.
El egoísmo no es opción, los candidatos deben unirse para dar al pueblo la dirección.
No dividir las votaciones. Tiene que ser tan contundente y numerosa que ni la Registraduría pueda vencernos con sus votos dobles y los ficticios. Recordemos que los muertos también votan por cuenta de quién ostenta el control.
Cada voto es vital.
Las urnas son nuestra única opción, ahora que apenas está empezando a instalarse el comunismo.
Somos los únicos responsables del futuro de nuestra amada patria.
Todos a las urnas.
Sin pretensiones egoístas. Un puesto no vale la LIBERTAD que nos da la DEMOCRACIA.
