Las autoridades activaron un operativo de búsqueda en zonas rurales del Cauca luego de conocerse el secuestro de Miguel Ayala, hijo del cantante de música popular Giovanny Ayala, quien fue retenido junto a su mánager mientras se movilizaba por la vía Panamericana.
La información preliminar señala que el hecho se presentó en la noche del 18 de noviembre, en un tramo comprendido entre Popayán y el norte del departamento.
El caso fue reportado inicialmente alrededor de las 7:00 de la noche, cuando se indicó que Miguel Ayala viajaba en una camioneta desde Popayán con dirección al aeropuerto de Palmira, en el Valle del Cauca.
A la altura de la vereda El Túnel, en jurisdicción de Piendamó, el vehículo habría sido interceptado por dos automóviles y una motocicleta. Los ocupantes fueron obligados a retornar hacia la capital caucana y posteriormente desviados al sector de Las Tres Margaritas, con ruta hacia el lago El Bolsón, zona rural de Cajibío.
Reportes de medios regionales señalan que los dos ocupantes del vehículo fueron sometidos y trasladados con destino desconocido. Tras la confirmación del secuestro por parte de autoridades locales, se inició un despliegue por aire y tierra en sectores donde tienen presencia grupos armados organizados, entre ellos estructuras asociadas al frente Dagoberto Ramos.
Información conocida previamente indica que Miguel Ayala había realizado días antes una presentación artística en el corregimiento de Huisitó, municipio de El Tambo, una zona con presencia de actores armados y en la que operan estructuras disidentes. Versiones coinciden en que la retención se produjo horas después de esa actividad musical, mientras el artista se desplazaba por uno de los corredores más transitados del suroccidente del país.
El secuestro ocurre en un contexto de incremento de acciones violentas en el Cauca. Entre el 13 y 14 de noviembre se registró una detonación de un carro bomba en la vía Panamericana, en el sector de Tunía, y un ataque armado contra el senador Temístocles Ortega.
Ambos hechos fueron rechazados por el gobernador del departamento, Octavio Guzmán, quien señaló que distintas estructuras ilegales buscan afectar la movilidad, restringir a las comunidades y generar presión sobre la institucionalidad.
Las autoridades mantienen operativos en varios puntos del corredor vial y en áreas rurales cercanas a Cajibío y Piendamó. Los familiares de Miguel Ayala y su acompañante permanecen atentos a los reportes oficiales mientras avanzan las labores de rastreo en la zona.
