Mucha gente piensa que en la época de Pablo Escobar la producción de coca era insuperable, pero de acuerdo a un informe de la oficina de la ONU contra la Droga y el Delito, Colombia alcanzó un récord histórico, pues subió en un 53% entre 2022 y 2023.
En el momento Colombia tiene 253.000 hectáreas de hoja de coca sembradas, es decir, según Naciones Unidas, a 2023, la coca creció en 16 de los 19 departamentos donde hay reportes de siembras.
En el mismo informe se conoció que las zonas donde se produce más coca con fines ilícitos es la subregión del Catatumbo, en Norte de Santander y la frontera con Venezuela; el departamento del Putumayo, en la Amazonia y en cercanías a Ecuador; el departamento del Cauca y la Costa Pacífica, y el Urabá antioqueño.
En estas zonas se concentra el 35% de todos los cultivos, y curiosamente son los lugares donde más hacen presencia los grupos armados ilegales.
Para el caso del departamento de Antioquia, el mandatario seccional, Andrés Julián Rendón, indicó que el crecimiento de la siembra de coca, es un elemento de mayor influencia para el desarrollo del conflicto.
Un ejemplo claro es el municipio de Briceño, este llegó a ser declarado libre de coca y libre de minas antipersonas y hoy está inundado de los dos, así lo manifestó el mandatario de los antioqueños y cuestionó de nuevo la llamada «Paz Total» de Gustavo Petro.
En el marco de conocer este informe de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, en Antioquia se identificaron un total de 18.785 hectáreas sembradas de coca durante 2023, equivalente a un 16% más que en el año 2022.
Con esta cifra se hace el comparativo a que casi la mitad del municipio de Medellín está sembrada de coca.
En medio de las cifras 30 localidades antioqueñas tienen este tipo de cultivos que además coinciden con zonas de interés por parte de los grupos armados, es decir, que son corredores claves de movilidad para el tráfico de armas, tropas e incluso la misma coca de cara a su exportación hacia Centro y Norteamérica.