Una entrevista realizada por el periodista Julián Collazos al futbolista profesional colombiano Julián Zea, desató una polémica en el País. El delantero, que milita actualmente en el fútbol árabe, hizo unas declaraciones en las que señaló que el entrenador Hubert Bodhert, mientras dirigía el equipo Alianza Petrolera le exigió un pago para ponerlo a jugar: “Eran 30 millones de pesos el semestre y vos no sabías si el técnico iba a durar todo el campeonato”.
El delantero incluso aseguró que había jugadores que sí le pagaban al entrenador para poder estar en la titular. Zea debutó en el Cali, de allí pasó al fútbol panameño, en el 2020 llegó al club Alianza Petrolera donde coincidió con Bodhert y desde el 2023 milita en la liga egipta.
Bodhert en entrevista con Noticias Caracol, aseguró que el futbolista ha sido indisciplinado y que ante las declaraciones buscará limpiar su buen nombre: “En estos momentos, hablé con el abogado del club y estaré presentando una denuncia formal por injuria y calumnia. Él tiene que decirme cuándo, dónde y cómo le pedí dinero. Yo nunca le pedí plata a ese señor ni a ningún jugador para que jugara. Eso no ha pasado y no pasará”, aseguró el estratega.
Las declaraciones de Zea volvieron a poner sobre la mesa, o mejor, sobre el gramado, un tema de pasillo, ¿Es real que algunos jugadores deben pagar por jugar?
