La Superintendencia de Sociedades aceptó a Credivalores-Crediservicios en un proceso de reorganización empresarial bajo los términos de la Ley 1116 de 2006, conocida como Ley de Insolvencia.
Esta decisión se tomó luego de tres intentos de la compañía por acogerse al mecanismo que busca reestructurar sus pasivos y garantizar la continuidad de sus operaciones.
La resolución, emitida este viernes 13 de diciembre, señala: “Admitir a la sociedad Credivalores – Crediservicios S.A., Nit: 805.025.964-3, domicilio en Bogotá D.C., al proceso de reorganización regulado por la Ley 1116 de 2006 y las normas que la complementan o adicionan”.
En agosto de 2024, Credivalores había presentado su primera solicitud ante la Superintendencia de Sociedades. Sin embargo, esta fue rechazada, al igual que una segunda solicitud presentada en noviembre, que también fue denegada tras la resolución de un recurso de reposición. Según la empresa, el rechazo inicial se debió a un error en la recepción de la información requerida.
El 22 de noviembre, la compañía comunicó que presentaría nuevamente su solicitud con el objetivo de agilizar el proceso en beneficio de todas las partes involucradas. Este tercer intento concluyó de manera favorable con la aceptación del proceso de reorganización.
Situación financiera
Entre los argumentos presentados por Credivalores, la empresa destacó que no cuenta con una generación de caja operativa suficiente para cubrir sus pasivos corrientes, lo que refleja una incapacidad de pago inminente.
Según sus estados financieros al 31 de marzo, la compañía reportaba deudas inmediatas por 226.071 millones de pesos, mientras que sus cuentas por cobrar ascendían a 131.135 millones de pesos. En total, los pasivos de la empresa sumaban 1,5 billones de pesos.
Además, la firma señaló una cuenta por pagar a Ban100 por 53.965 millones de pesos, monto que podría exceder la exposición legal permitida por el Estatuto Orgánico del Sistema Financiero.
Plan de reorganización
Credivalores indicó que el proceso busca garantizar la sostenibilidad de la compañía a largo plazo mediante la reestructuración de sus pasivos y el fortalecimiento de su estabilidad financiera.
En un comunicado, la empresa expresó que continuará informando a la opinión pública sobre los avances del proceso y reiteró su confianza en la Superintendencia de Sociedades para llevar adelante el trámite de manera imparcial y eficiente.
Con esta aceptación, Credivalores entra oficialmente en el proceso de reorganización, en el que deberá trabajar para superar las dificultades financieras y cumplir con sus obligaciones hacia los acreedores.