La Mesa Directiva del Senado de la República se pronunció con contundencia frente al atentado que dejó gravemente herido al senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay, ocurrido el pasado 7 de junio en el barrio Modelia de Bogotá.
A través de un comunicado oficial, el Congreso expresó su “enérgico rechazo al atentado perpetrado contra nuestro colega” y manifestó su “profunda solidaridad con su esposa, María Claudia, sus hijos, su padre, Miguel, y demás familiares, así como con su equipo de trabajo”. Además, elevaron oraciones por su pronta y completa recuperación.
El documento advierte sobre la gravedad de este hecho, que mantiene al senador en estado crítico, y lo califica como “una alarmante muestra de los riesgos que enfrentan los líderes políticos y congresistas en el actual contexto de polarización y confrontación que vive el país”. También se hace un llamado a frenar el discurso de odio, la intolerancia y la violencia, afirmando que “la escalada de violencia pone en peligro no solo la integridad de quienes ejercen la representación popular, sino también la estabilidad del sistema democrático”.
Desde la Presidencia del Senado, liderada por Efraín Cepeda Sarabia, y acompañado por las vicepresidentas Beatriz Lorena Ríos Cuéllar y Paola Holguín Moreno, se solicitó al Gobierno Nacional “la adopción inmediata de medidas efectivas para reforzar los esquemas de seguridad de los congresistas, candidatos presidenciales, demás actores políticos y las instalaciones del Congreso de la República”.
El Senado también instó a las autoridades a realizar “una investigación ágil, exhaustiva y transparente para esclarecer los hechos relacionados con el atentado contra el senador Uribe Turbay, identificar a los responsables materiales e intelectuales y garantizar que enfrenten las sanciones correspondientes”.
Finalmente, el Congreso hizo “un llamado urgente a la unidad nacional para rechazar categóricamente la violencia política en todas sus formas”, destacando que la polarización no puede ser excusa para la intolerancia ni para atentar contra la vida de los líderes políticos.
El mensaje concluye reiterando el compromiso del Senado con “la defensa de la democracia, la seguridad de los representantes del pueblo colombiano y el fortalecimiento de las instituciones”, confiando en que las autoridades actuarán con la diligencia que exige este momento crítico para el país.
