La tranquilidad de Jamundí, en el Valle del Cauca, se vio interrumpida cuando un explosivo fue lanzado cerca de la Estación de Policía del corregimiento de Potrerito. Afortunadamente, según las autoridades, el ataque no dejó heridos, pero sí generó gran preocupación entre los habitantes de la zona.
El hecho ocurrió en el sector conocido como Potrerito, donde algunas viviendas cercanas a la estación de Policía resultaron afectadas por la onda expansiva del artefacto. Aunque no se registraron víctimas, el estallido causó daños materiales y generó temor entre la población, que se encontraba en su rutina habitual.
Las autoridades locales y nacionales han iniciado de inmediato las investigaciones para esclarecer los responsables de este ataque y evitar futuros incidentes. La Fiscalía General de la Nación, en conjunto con el Ejército y la Policía, está trabajando para determinar el origen del explosivo y si este hecho guarda relación con otros ataques en la región.
Cabe recordar que días antes, en el corregimiento de San Antonio, ubicado también en Jamundí, fueron hallados más de 50 artefactos explosivos. Estos artefactos estaban listos para ser utilizados en atentados tanto contra la Fuerza Pública como contra la población civil. El hallazgo de estos explosivos pone de manifiesto la grave situación de orden público que afecta la región y la creciente amenaza de grupos ilegales.
Este nuevo ataque en Potrerito aumenta las alertas de las autoridades, quienes han reiterado la necesidad de reforzar la seguridad en el sur del Valle del Cauca y redoblar esfuerzos para desmantelar las estructuras criminales que operan en la zona.
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