En una comunicación oficial enviada el 7 de julio de 2025 al procurador general, Gregorio Eljach, la entonces canciller Laura Sarabia explicó en detalle las razones detrás del retraso en la implementación del nuevo modelo de expedición de pasaportes en Colombia.
En el oficio, Sarabia señaló como factor determinante la demora en la aprobación del memorando de entendimiento con la Casa de la Moneda de Portugal, firmado inicialmente en octubre de 2024.
De acuerdo con el informe entregado por la excanciller, si bien el memorando fue suscrito el 2 de octubre de 2024, su aprobación formal por parte del gobierno portugués solo se produjo el 28 de febrero de 2025, con un desfase de tres meses respecto al cronograma original.
Este retraso, según el documento, impidió la estructuración oportuna del proceso contractual entre la Cancillería colombiana y la Imprenta Nacional, entidad que debía asumir la producción de los pasaportes.
Ante este escenario, y dada la imposibilidad de avanzar con los tiempos previstos, la Cancillería conformó un Comité Operativo para evaluar alternativas. Dicho comité sesionó en seis ocasiones entre abril y junio de 2025, con participación de entidades como Migración Colombia, el Ministerio de Hacienda y la representación técnica de Portugal.
Las conclusiones del comité indicaron que no existían condiciones materiales ni financieras que permitieran abrir una licitación pública en el plazo disponible, sin comprometer la continuidad del servicio. A partir de este análisis, se definieron dos posibles rutas a seguir.
La primera consistía en declarar una urgencia manifiesta que permitiera prorrogar el contrato con la empresa Thomas Greg & Sons por un periodo de entre nueve y once meses, mientras se fortalecían las capacidades operativas de la Imprenta Nacional. La segunda opción contemplaba abrir un nuevo proceso de selección pública que incluyera en sus términos la obligación de capacitar a la entidad estatal para asumir completamente la operación una vez finalizado el contrato.
El informe remitido por Sarabia también detalla que, bajo su gestión, se dio continuidad a las decisiones ya adoptadas, incluida la formalización del memorando con Portugal. Según el texto, el convenio específico entre la Cancillería y la Imprenta Nacional, necesario para avanzar en la implementación del nuevo modelo, fue remitido a revisión jurídica el 2 de julio, y las observaciones correspondientes llegaron cinco días después, el 7 de julio.
El documento establece que dicho convenio solo entraría en vigencia una vez la Imprenta Nacional de Colombia establezca un acuerdo formal con la Casa de la Moneda de Portugal. Este acuerdo tendrá que definir un cronograma detallado de implementación y resolver aspectos técnicos y presupuestales que aseguren la continuidad y calidad del servicio de expedición de pasaportes.
La explicación entregada por la excanciller se da en medio de cuestionamientos al proceso de transición en la expedición de pasaportes, que ha generado incertidumbre frente a la capacidad del Estado para garantizar la producción oportuna de estos documentos a partir del segundo semestre de 2025.