Tras el atentado contra los ciudadanos venezolanos Luis Alejandro Peche Arteaga y Yendri Omar Velásquez Rodríguez este lunes en Bogotá, ambos reconocidos por su labor política y de defensa de los derechos humanos, la policía sigue tras las pistas de los autores de los hechos.
De acuerdo con el coronel Ricardo Chaves, comandante de la Estación de Policía Usaquén, los dos hombres fueron atacados con arma de fuego y resultaron heridos en las extremidades inferiores.
“Se presenta un hecho en el sector de Cedritos, donde desafortunadamente dos personas de nacionalidad venezolana resultan lesionadas por varios impactos de arma de fuego. Inmediatamente, se hace la verificación y se establece que el vehículo utilizado habría salido del mismo edificio minutos antes del ataque”, indicó el oficial.
Ambas víctimas fueron trasladadas a la Clínica Reina Sofía, donde reciben atención médica y se encuentran fuera de peligro. La Policía Metropolitana de Bogotá activó un plan candado para localizar a los responsables, logrando posteriormente la recuperación del vehículo utilizado en la agresión, el cual fue hallado en la localidad de Suba.
“Logramos la ubicación del vehículo en la localidad de Suba. Dentro de este vehículo fueron halladas las dos pistolas que habrían sido utilizadas para cometer los hechos”, añadió el coronel Chaves. Las autoridades continúan con la identificación de los presuntos responsables y la trazabilidad de los elementos incautados.
Según el seguimiento hecho por la Policía a través de las cámaras de seguridad del sector, los atacantes siguieron a los activistas desde el mismo conjunto residencial en el que residían. Los hombres salieron en un vehículo particular, mientras que los presuntos sicarios, a bordo de un carro plateado, los alcanzaron pocos metros adelante para ejecutar el ataque y luego huir del lugar.
Luis Peche, quien también es consultor político, y Yendri Velásquez, activista de Amnistía Internacional y miembro del Observatorio Venezolano de Violencias LGBTIQ+, se refugiaron en Colombia tras haber denunciado persecución en su país de origen. Ambos manifestaron en redes sociales que continuarán con su labor en defensa de los derechos humanos.
Desde Amnistía Internacional, su directora adjunta para Colombia, Nastassja Rojas, condenó el atentado y pidió una investigación “eficaz, rápida y transparente”. También solicitó fortalecer los mecanismos de protección para personas migrantes y solicitantes de refugio, advirtiendo que los procesos actuales son extensos y pueden tardar varios años.
Las autoridades colombianas mantienen abierta la investigación para esclarecer los hechos y determinar si el ataque está relacionado con las actividades políticas o de activismo de las víctimas. Mientras tanto, los organismos de derechos humanos y la comunidad migrante han solicitado medidas de protección para los dos líderes venezolanos que permanecen bajo observación médica.
