La decisión de la Comisión Séptima del Senado de archivar la reforma a la salud, en el cierre de las sesiones ordinarias, generó una reacción inmediata del presidente Gustavo Petro, quien cuestionó el trámite legislativo y planteó la posibilidad de impulsar los cambios al sistema mediante una Asamblea Nacional Constituyente si el Congreso no revive la iniciativa.
A través de su cuenta en X, el jefe de Estado afirmó que la crisis del sistema de salud se arrastra desde hace una década, cuando, según su postura, las Entidades Promotoras de Salud pasaron a operar como aseguradoras financieras.
En ese contexto, sostuvo que a partir de ese modelo se incrementaron las irregularidades en el manejo de los recursos y se produjo la liquidación de más de un centenar de EPS, lo que, indicó, dejó deudas sin saldar con prestadores y clínicas.
El presidente reiteró que la reforma presentada por su Gobierno buscaba fortalecer un enfoque preventivo y territorial de la atención en salud. Según expresó, la iniciativa fue bloqueada por sectores políticos que, en su criterio, mantienen intereses en la privatización del sistema. Tras el archivo del proyecto, recordó que la decisión de la Comisión Séptima fue apelada, por lo que el trámite aún podría retomarse en el Congreso.
En ese mismo mensaje, Petro señaló que, si el Legislativo no aprueba la reforma, el Gobierno impulsaría una Asamblea Nacional Constituyente, apoyada en la recolección de firmas ciudadanas y en el respaldo del nuevo Congreso que resulte de las próximas elecciones. El mandatario manifestó su expectativa de que ese eventual escenario responda a lo que calificó como los intereses del electorado.

El ministro del Interior, Armando Benedetti, también reaccionó al hundimiento de la reforma y cuestionó duramente la actuación de la Comisión Séptima. En declaraciones públicas, sostuvo que ese mismo órgano legislativo había archivado previamente la reforma laboral, iniciativa que luego fue retomada y aprobada en la plenaria del Congreso. Benedetti afirmó que, a su juicio, estas decisiones han afectado proyectos impulsados por el Ejecutivo en materia social.
En otro pronunciamiento, el presidente Petro destacó que durante su administración el sistema de salud ha recibido mayores asignaciones presupuestales. Señaló que esos recursos han permitido la renovación de hospitales y puestos de salud, la adquisición de ambulancias para municipios y una reducción en los indicadores de mortalidad por desnutrición infantil. Estas afirmaciones fueron presentadas como parte de su defensa de la gestión del Gobierno en el sector.
La reforma a la salud fue archivada con una votación de ocho senadores en contra y cinco a favor en la Comisión Séptima del Senado. Los congresistas que respaldaron el archivo argumentaron que el proyecto carecía de una financiación clara y que no resolvía los problemas estructurales del sistema.
Pese a ello, el trámite de apelación mantiene abierta la posibilidad de que la iniciativa sea discutida nuevamente en el Legislativo, mientras el debate político se traslada a escenarios institucionales y públicos más amplios.








