El presidente Gustavo Petro se refirió este miércoles a la política de aplazamiento de gasto nacional en Bogotá, señalando que obedece a la negativa de las comisiones económicas del Congreso de aprobar el financiamiento del presupuesto de 2025. Según explicó, esta decisión afecta varias inversiones en la capital, incluido el proyecto del tranvía de occidente.
“Yo hablé personalmente con el Alcalde de Bogotá sobre nuestra política de aplazamiento de gasto nacional en Bogotá, dada la negativa de las comisiones económicas en financiar el presupuesto del año 2025”, afirmó el mandatario. En el caso del Metro, aseguró que el Gobierno se limita a cumplir el convenio firmado en administraciones anteriores: “Ni una palabra más ni una palabra menos”.
Petro indicó que el aplazamiento del tranvía se debe a la presencia de un tubo de conducción de gasolina Jet al aeropuerto, lo que impediría ejecutar los recursos en este momento. Además, reiteró que los fondos para transporte masivo solo se entregarán si los proyectos son férreos o para electrificación, y aseguró que su administración puede garantizar la compra de flotas de buses con vigencias futuras para reducir las tarifas del transporte público, priorizando a la población más vulnerable.
El jefe de Estado también advirtió que si el Congreso no aprueba la reforma tributaria que presentará su Gobierno, las partidas aplazadas podrían convertirse en recortes definitivos. “La prioridad que me impuse fue no aplazar los recursos que generan la justicia social en Colombia y los derechos universales”, sostuvo, y cuestionó a quienes critican los recortes: “No entiendo a congresistas y líderes políticos gritando contra el recorte, cuando ellos mismos votaron contra el financiamiento del presupuesto, contra sus regiones y contra su gente”.
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