En la XXII Conferencia Iberoamericana de Ministros de Trabajo, realizada bajo el marco de la Organización de Estados Americanos (OEA) y con España como país invitado, el presidente colombiano, Gustavo Petro, reiteró su posición contraria a la firma de nuevos contratos para la explotación de petróleo.
Con un tono enfático, Petro manifestó que no firmará dichos contratos porque, en su visión, exponen al país y a futuras generaciones a un riesgo de muerte inminente. “No quiero (firmar), porque yo sé que esa firmita de contratos nuevos de exploración, lo que entrañan, dentro de 10 años o 15, es que todos los aquí presentes, nuestros hijos y nuestros nietos queden expuestos a la muerte”, declaró el mandatario.
La posición de Petro, como un defensor del medio ambiente y fuerte crítico de las economías extractivistas y los combustibles fósiles, apunta a una transición hacia modelos energéticos sostenibles, un enfoque que considera crucial para evitar la extinción humana.
Petro ha indicado en varias ocasiones que el uso y la expansión de los combustibles fósiles llevan al planeta a un estado irreversible de crisis ambiental, postura que ha desatado fuertes polémicas y divisiones dentro y fuera de su administración.
Las reacciones de los expertos: un «suicidio económico» para Colombia
Para el académico y exministro de Comercio y Hacienda José Manuel Restrepo, el anuncio de no firmar nuevos contratos de exploración de gas y petróleo representa, en sus palabras, un “suicidio económico” para Colombia.
En su cuenta de X, Restrepo enumeró los riesgos que, desde su perspectiva, acarrea esta decisión. Según el exministro, el cese de nuevos contratos podría llevar a una crisis económica de proporciones alarmantes, dado que la economía colombiana depende en gran medida del sector energético.
Restrepo detalló que la decisión pone en jaque el 5,6% del Producto Interno Bruto (PIB) de Colombia, el 20% de los ingresos fiscales, el 35% de la inversión extranjera directa, el 40% de las exportaciones y el 80% de las regalías, recursos vitales para la inversión social y productiva de los departamentos.
En una frase contundente, el exministro cuestionó si Colombia debe “morir de inanición económica” en aras de ser un “mártir de la humanidad” cuando otras naciones no asumen compromisos tan radicales.
Además, Restrepo recordó que Colombia solo es responsable del 0,6% de los gases de efecto invernadero a nivel mundial, lo que plantea una crítica a la estrategia de Petro de asumir lo que él considera un sacrificio desproporcionado.
“Siempre es posible una transición energética ordenada y responsable, teniendo claro las alternativas de supervivencia a corto y mediano plazo, y eso hoy no es claro”, enfatizó Restrepo, sugiriendo que el país podría explorar rutas menos extremas y más sostenibles para llevar a cabo la transición energética.