viernes, mayo 2, 2025
InicioOpiniónJosé Manuel Restrepo Abondano(OPINIÓN) "Ecopetrol: De iguana a lagartija. Por: José Manuel Restrepo

(OPINIÓN) «Ecopetrol: De iguana a lagartija. Por: José Manuel Restrepo

fauna area metropolitana

La empresa que ha sido la joya de la corona y fuente de más del 11% del presupuesto nacional, parece que ha pasado de ser una “iguana” robusta a lucir como una “lagartija” enjuta. Si bien es cierto que bajo el actual gobierno, la compañía  mantiene una buena fortaleza operativa y ha enfrentado el impacto de la inflación y de los menores precios del petróleo, es igualmente cierto que  su situación financiera, de gobierno corporativo y estratégica, deja mucho que desear.

Las cifras lo evidencian. En 2022, Ecopetrol logró utilidades netas récord por 33,4 billones de pesos, el doble que en 2021; pero en 2024 su ganancia cayó a 14,9 billones (menos de la mitad del pico histórico) debido es cierto a los precios más bajos del crudo, pero también a decisiones de gobierno como la mayor carga tributaria al sector. La sola reforma tributaria de 2022 elevó la tasa efectiva de impuestos de 31,4% a 36,6%, mermando la rentabilidad. A la vez, los dividendos se desplomaron: el dividendo ordinario aprobado en 2025 fue de $214 por acción, el más bajo en cuatro años (frente a $593 el año anterior).

Paradójicamente, la producción de Ecopetrol marcó en 2024 su mayor nivel en nueve años: 746.000 barriles equivalentes por día. Gran parte de ese crecimiento provino del desarrollo no convencional (fracking) en la cuenca Permian (USA), que aporta cerca del 9% de la producción. Sin ello, la extracción habría caído -4%. En otras palabras, Ecopetrol solo evitó el declive natural de sus campos domésticos gracias a una iniciativa que el gobierno prohíbe en Colombia y que es ocho veces más limpia que cualquier otro proyecto de la entidad.

Preocupa también el debilitamiento del gobierno corporativo y la politización de Ecopetrol. Algunas de las decisiones de la entidad, se dice, han sido intervenidas por el gobierno nacional, acudiendo a esa lógica de “fundamentalismo ambiental” y dogmatismo. Estas posibles injerencias minan la autonomía técnica de la petrolera y generan incertidumbre sobre su rumbo.

A esto se suma la política petrolera del gobierno actual. La decisión de no firmar nuevos contratos de exploración y de vetar la exploración no convencional pone en riesgo el futuro de Ecopetrol.  En 2024 la empresa repuso el 104% de las reservas que produjo, pero aun así sus reservas probadas bajaron de 2.000 a 1.893 millones de barriles entre 2021 y 2024. Frenar la exploración hoy equivale a sacrificar la sostenibilidad de mañana; es una determinación más ideológica que técnica que debilita la capacidad estratégica de Ecopetrol y pone en riesgo el futuro de todos.

Para que Ecopetrol recupere su robustez de iguana y no siga empequeñeciéndose como lagartija, se requieren medidas inmediatas. En particular: fortalecer la gobernanza con una Junta Directiva independiente y meritocrática; reanudar la exploración convencional y permitir proyectos no convencionales con estrictos estándares ambientales para reponer reservas; y acelerar la diversificación hacia energías limpias sin desmantelar prematuramente el negocio de hidrocarburos que financia la transición. Mas que inteligencia artificial se necesita es inteligencia emocional y de gestión, para evitar que la empresa siga en decadencia. La empresa no se va a quebrar, pero se necesita gestión y buenas decisiones.

ÚLTIMAS NOTICIAS