Desde el próximo 1 de agosto, el túnel de Quebradablanca, en el corredor vial que conecta Bogotá con Villavicencio, será cerrado totalmente al tránsito vehicular por un periodo estimado de tres meses.
La medida fue confirmada por la concesionaria Coviandina, encargada de la operación y mantenimiento de la vía al Llano, tras anunciar el inicio de obras de reparación estructural en uno de los puntos más afectados por el incendio ocurrido en diciembre de 2023.
El evento, que comprometió seriamente la infraestructura del túnel piñal, generó daños en aproximadamente 320 metros de su extensión total de 799 metros. Coviandina señaló que los trabajos de intervención se realizarán entre las abscisas k55+626 y k55+946. La intervención contempla:
- Demolición de losas de concreto deterioradas
- Reconstrucción del canal lateral de drenaje
- Obras en la estructura del túnel falso afectado
La programación del cierre coincidió con una temporada en la que tradicionalmente el tráfico vehicular disminuye en el corredor, con el objetivo de reducir el impacto en la movilidad general. Durante el tiempo que duren las obras, el tránsito será desviado a la calzada en sentido Villavicencio–Bogotá, que operará de manera bidireccional entre el peaje de Naranjal y la salida del túnel Mesa Grande.
De acuerdo con el plan de contingencia presentado, la circulación por esta vía alterna será controlada por personal vial y agentes de tránsito, quienes estarán desplegados para orientar a los conductores y garantizar la seguridad de los usuarios. Se habilitará el paso para vehículos particulares, de carga y transporte público, aunque con restricciones dependiendo del avance de las obras.
Además de los trabajos internos en el túnel, la concesionaria anunció que se llevarán a cabo labores externas:
- Remoción de escombros
- Adecuación del sistema de drenaje
- Reacondicionamiento del entorno vial, para restablecer las condiciones de seguridad y funcionamiento óptimo del corredor.
Para mitigar los efectos del cierre en la movilidad local, se activó un Plan de Contingencia Operativa coordinado con las autoridades nacionales y regionales. Este plan contempla medidas especiales para la comunidad residente en las veredas Limoncitos y Monterredondo, así como el acceso controlado a servicios esenciales a lo largo del tramo, incluyendo estaciones de combustible, restaurantes y alojamientos.
Coviandina reiteró que la intervención responde a una necesidad técnica identificada tras un análisis estructural y que busca preservar la integridad de los usuarios y la funcionalidad de la vía. El cierre, aunque temporal, forma parte de una estrategia de recuperación que también apunta a prevenir mayores afectaciones a futuro.
La recomendación a los usuarios es planificar con anticipación sus desplazamientos, atender las indicaciones del personal en la vía, respetar la señalización y consultar permanentemente los canales oficiales de Coviandina, el Ministerio de Transporte y la Agencia Nacional de Infraestructura para actualizaciones sobre el estado del corredor y posibles rutas alternas.