El proceso judicial que se adelanta contra el excongresista Julián Bedoya, investigado por presuntas irregularidades en la obtención de su título de abogado en la Universidad de Medellín, ha vuelto a experimentar un nuevo aplazamiento. La audiencia que estaba prevista para el pasado martes 22 de abril fue reprogramada para el próximo 19 de mayo, debido a que el fiscal a cargo del caso, Fernando Augusto Arias Velásquez, se encuentra de vacaciones.
De acuerdo con la información oficial, el Fiscal solicitó su periodo de descanso el 12 de febrero, con antelación suficiente y antes de que se estableciera la fecha inicial de la audiencia. Sin embargo, la coincidencia de su ausencia, que se extiende hasta el 16 de mayo, ha causado molestia en distintos sectores, al dejar al proceso sin su principal representante durante más de un mes.
Este nuevo aplazamiento se suma a una serie de dilaciones que ha enfrentado el caso, lo cual ha generado inconformidad en sectores sociales, académicos y políticos, que consideran urgente avanzar con celeridad en la resolución de un proceso de alto perfil.
El caso de Julián Bedoya se centra en las presuntas inconsistencias durante el proceso de validación académica que permitió la obtención de su título de abogado. Según las investigaciones en curso, existen dudas sobre la legalidad de la aprobación de exámenes de suficiencia, ya que algunos de estos habrían sido evaluados por docentes que, al parecer, no estaban formalmente vinculados a las asignaturas correspondientes.
El excongresista ha mantenido su defensa y sostiene que su proceso académico fue válido. No obstante, la investigación avanza bajo la competencia de la Fiscalía, que busca determinar si hubo manipulación o irregularidades en los procedimientos internos que le permitieron acceder al título profesional.