La Ceja, Antioquia, se prepara para vivir la versión número 47 de sus tradicionales “Fiestas del Toldo, la Bicicleta y las Flores”, una celebración que refleja el profundo vínculo cultural, social y económico entre la comunidad y la floricultura, actividad que ha marcado el desarrollo del municipio durante más de cinco décadas.
Este evento, considerado como la principal fiesta cultural de los cejeños, rinde homenaje a una industria que genera cerca del 70% del empleo local, aportando bienestar y estabilidad a miles de familias. Según destacó Augusto Solano, presidente de Asocolflores, la floricultura “ha transformado vidas, impulsado comunidades y alimentado la cultura” de esta región del Oriente antioqueño.
Uno de los actos más esperados será el desfile “Bicicleta en Flor”, que tendrá lugar el próximo 17 de agosto. En él, decenas de bicicletas decoradas con flores recorrerán las calles, evocando la tradición de los trabajadores que, desde los años setenta, encontraron en la bicicleta su principal medio de transporte hacia los cultivos.
La alcaldesa María Ilbed Santa resaltó el aporte histórico del sector: “Nuestras fiestas hacen honor a las flores. El empleo que han generado durante décadas es sinónimo de progreso, calidad de vida y bienestar para nuestros habitantes”. La llegada de los cultivos de exportación permitió que, especialmente las mujeres, accedieran a un empleo formal y estable, lo que les permitió consolidar sus hogares, educar a sus hijos y alcanzar nuevas metas personales.
Más allá del impacto económico, la floricultura ha potenciado nuevas oportunidades en el ámbito turístico y educativo. En alianza con Zona Bici, se promueven programas de “bicicultura” y “biciturismo”, que permiten a visitantes y estudiantes conocer de cerca los cultivos y la historia que conecta a La Ceja con el mundo. Más de 6.500 niños del Oriente Antioqueño han participado en estas experiencias, acercándose a la realidad del sector.
Durante esta edición también se realizará un acto especial para 17 niños de Santa Elena que se destacaron en el desfile de silleteritos de la Feria de las Flores. Ellos recorrerán en bicicleta un cultivo en La Ceja, donde podrán aprender cómo se producen las flores utilizadas en sus silletas.
Las fiestas, que iniciaron como simples mercados bajo toldos de tela, hoy representan un legado cultural y social. En La Ceja, las flores y la bicicleta no solo simbolizan tradición, sino también el motor que ha forjado identidad, oportunidades y progreso para toda una comunidad.