El expresidente del Congreso Iván Name Vásquez reaccionó con una actitud optimista ante la apertura de la investigación en su contra por parte de la Corte Suprema de Justicia.
A pesar de las acusaciones de cohecho impropio y peculado por apropiación en el contexto del escándalo de corrupción en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd), Name se mostró dispuesto a enfrentar el proceso judicial con la convicción de que “brillará la justicia”.
Durante la plenaria del Senado el 5 de noviembre, Name rompió su silencio y defendió su inocencia ante sus colegas, asegurando que nunca recibió ni solicitó sobornos, como se le imputa.
El proceso en su contra tiene como base las denuncias de Olmedo López y Sneyder Pinilla, exdirectivos de la Ungrd, quienes aseguran que el Senador habría recibido un soborno de $3.000 millones a cambio de aprobar las reformas del gobierno de Gustavo Petro.
“Nunca recibí nada, ni pedí, ni me fue ofrecido para que beneficiara las reformas del Gobierno”, dijo Name, aludiendo a los supuestos intentos del Presidente de culparlo por las derrotas en las reformas políticas, incluidas las que se han hundido en el Congreso.
“Las reformas políticas que han venido aquí, en otros gobiernos, también las que no compartimos, se han hundido. Como se va a hundir la reforma de la política que ha presentado este Gobierno por segunda vez”, agregó.
Una de las críticas que ha enfrentado el exsenador se centra en la delegación de la Presidencia de algunas sesiones del Senado a la entonces vicepresidenta, María José Pizarro, lo cual fue interpretado por algunos como un intento de favorecer la reforma pensional.
Sin embargo, Name aclaró que sus ausencias no estaban relacionadas con ese objetivo y que las delegaciones fueron meras cuestiones operativas.
«Bienvenida la investigación»
A pesar de la gravedad de las acusaciones, Name adoptó una postura de aceptación, considerando la investigación una oportunidad para limpiar su nombre.
“Bienvenida la investigación. Nunca abandonaré la jurisdicción de la corte para ser juzgado en otra instancia”, aseguró el exsenador, que además se mostró “feliz” por ingresar a la Corte Suprema, destacando su confianza en la justicia.
Según Name, la apertura del proceso judicial representa una oportunidad para que la verdad salga a la luz, y para que la justicia, aunque llegue tarde, prevalezca. “Después de la tiniebla viene el sol”, afirmó, subrayando su respeto y devoción por la justicia, sin importar el dictamen final del tribunal.
El expresidente del Congreso también dejó claro que, además de su comparecencia ante la Corte Suprema, no se pronunciaría públicamente sobre el caso, a excepción de lo que dijera en su intervención en el Senado. Con ello, reafirmó su posición de mantener el foco de su defensa en el ámbito judicial.
Cabe resaltar que en las últimas horas se conoció que Name habría utilizado dichos dineros para el financiamiento de campañas políticas de familiares como la de su hija, María Clara Name, quien compitió por un puesto en el Concejo de Bogotá en representación del Partido Verde.