El uso de pólvora durante las festividades de fin de año genera un impacto grave en la fauna silvestre del Valle de Aburrá. Según el Centro de Atención y Valoración de Fauna Silvestre (CAVR) del Área Metropolitana, las llamadas de emergencia relacionadas con animales silvestres aumentan un 10% en esta temporada.
El sonido y las explosiones de la pólvora provocan pánico en estos animales, ocasionando arritmias cardíacas que pueden derivar en paros cardíacos, especialmente en aves y especies pequeñas. Además, muchas veces estas emergencias no son reportadas, como sucede con las aves que mueren tras colisiones o desorientación, lo que genera un subregistro en los datos oficiales.
“La pólvora afecta gravemente a nuestros animales silvestres, causando muertes directas y desplazamientos peligrosos. Decir Soy antipólvora es también proteger la biodiversidad que habita nuestro territorio”, afirmó Paula Andrea Palacio Salazar, directora del Área Metropolitana del Valle de Aburrá.
Las explosiones también provocan que los animales huyan hacia zonas desconocidas, aumentando el riesgo de atropellamientos o accidentes al chocar contra edificios y vehículos. Adicionalmente, los incendios forestales causados por la pólvora y los globos incrementan la pérdida de hábitats naturales.
En este contexto, la campaña Soy antipólvora, liderada por la Gobernación de Antioquia, la Policía Nacional y el Área Metropolitana del Valle de Aburrá, busca generar conciencia sobre los impactos negativos del uso de pólvora, no solo en los animales silvestres, sino también en el medio ambiente y la comunidad.