En cumplimiento del Decreto 0448 del 17 de abril de 2025, ya el Gobierno Nacional definió la creación de una Zona de Ubicación Temporal en zona rural del municipio de Tibú, Norte de Santander como parte de una fase avanzada del proceso de paz con el Frente 33 del Estado Mayor de Bloques y Frentes (EMBF) de las FARC-EP, con el objetivo de dar paso a la dejación de armas y el tránsito a la vida civil de sus integrantes.
Según lo confirmó el presidente Gustavo Petro a través de su cuenta oficial en X la instalación de esta zona marca un hito en los diálogos con ese grupo armado:
“Se acuerda zona de paz para la dejación de la violencia con el Frente 33 del Estado Mayor y el gobierno nacional. Allí se congregarán los combatientes y armas del Frente 33. Comienza la paz del Catatumbo”.
El Frente 33 del EMBF, según información oficial, está bajo el mando de alias Calarcá Córdoba y las cifras entregadas por el Puesto de Mando Unificado, hasta el momento 161 combatientes han optado por la desmovilización: 130 de ellos eran disidentes, 4 pertenecían al ELN y 27 son menores de edad.
La instalación de esta zona se realizará bajo las directrices establecidas en la Ley 2272, también conocida como la Ley de la Paz Total, la cual define las características de estas áreas como espacios destinados al tránsito hacia la legalidad, garantizando los derechos de los habitantes y promoviendo la participación activa de las comunidades en las decisiones posteriores.
Además, se ha enfatizado que durante esta fase del proceso se respetarán las libertades y derechos de los habitantes del Catatumbo, una región históricamente golpeada por el conflicto armado.
Sin embargo, el anuncio ha generado preocupación entre autoridades locales. El alto consejero de Paz en Norte de Santander, Luis Fernando Niño, expresó su inquietud por el hecho de que los disidentes estarán agrupados en una zona que también tiene presencia del ELN, lo cual podría representar desafíos adicionales en términos de seguridad y convivencia en el territorio.