El Gobierno de Gustavo Petro está en proceso de desarrollar un nuevo sistema de contratación pública que reemplazará al actual SECOP (Sistema Electrónico de Contratación Pública).
La iniciativa, según las autoridades, busca crear un sistema “más eficiente y accesible” para la gestión de contratos del Estado.
Cristóbal Padilla, director de Colombia Compra Eficiente, afirmó que el SECOP actual es un «hazmerreír» y destacó que, en el contexto de la modernización, se pretende superar las deficiencias del sistema vigente. La transición hacia este nuevo sistema responde a la necesidad de optimizar el proceso de contratación pública, asegurando que sea más ágil y transparente.
Sin embargo, la decisión ha generado controversia. El concejal Daniel F. Briceño denunció, a través de la red social X, que la propuesta del Gobierno de Petro de acabar con el SECOP responde a que el sistema se ha convertido en un obstáculo para el Ejecutivo.
Según Briceño, la administración actual habría convertido a Colombia Compra Eficiente en una entidad poco técnica, cercana a intereses políticos y a la “caja de pago de los influenciadores del Gobierno”.
Este debate se intensificó tras la publicación de un curso gratuito por parte de Briceño, dirigido a enseñar a los ciudadanos a vigilar los contratos públicos en el SECOP. Según el concejal, el curso busca fortalecer el papel de los ciudadanos en el control de la contratación pública, algo que, en su opinión, no es bien visto por el Gobierno.
Por su parte, el presidente Gustavo Petro y su equipo han defendido la necesidad de reformar el sistema de contratación, argumentando que es necesario un cambio que se adapte a las necesidades actuales de transparencia y eficiencia en la administración pública.
El reemplazo del SECOP, mientras tanto, sigue siendo un tema de debate tanto en el ámbito político como en el de la gestión pública, con diversas voces críticas que se oponen a la medida.