El exsenador Julio Manzur compareció ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) por su presunto vínculo con hechos perpetrados por las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) en el departamento de Córdoba.
De acuerdo con la información, la presencia de Manzur ante el tribunal transicional marca un nuevo capítulo en el esclarecimiento de responsabilidades dentro del conflicto armado colombiano.
Es de indicar que el exsenador fue quien decidió someterse de manera voluntaria ante la JEP bajo la figura de agente del Estado no integrante de la Fuerza Pública, fue vinculado de inmediato por presuntos delitos de concierto para delinquir agravado y por supuestos nexos con las estructuras paramilitares que operaron durante varios años en la región. Su sometimiento abrió la posibilidad de que el tribunal conozca de primera mano su versión sobre los hechos que la justicia ordinaria también ha investigado.
Uno de los puntos centrales para las víctimas del conflicto es que el exsenador entregue información que ayude a esclarecer el presunto control burocrático que habrían ejercido las AUC en distintas entidades estatales de Córdoba.
Las organizaciones de víctimas han insistido en la importancia de conocer si existieron presiones, cooptaciones o influencias indebidas que afectaran la administración pública en ese departamento durante los años en que el paramilitarismo consolidó su poder territorial.
De igual manera, quienes esperan respuestas de esta diligencia buscan que Manzur aporte datos que permitan identificar posibles afectaciones a procesos electorales en el Urabá antioqueño y cordobés. Según han señalado distintos testimonios recopilados por la justicia transicional, las AUC habrían incidido en la selección de candidatos y en el desarrollo de contiendas electorales, por lo que la comparecencia del exsenador podría contribuir a esclarecer cómo se configuraron esas dinámicas y quiénes participaron en ellas.
Las víctimas solicitan que la información suministrada por Manzur permita esclarecer fenómenos criminales ocurridos en Córdoba, en los que presuntamente habría tenido algún nivel de participación o conocimiento.
Por su parte, la Jurisdicción Especial para la Paz aclara que esta diligencia no corresponde a un trámite judicial estricto, sino a un espacio diseñado para que el exsenador explique su papel frente a los hechos del conflicto en la región del Urabá.
El tribunal ha resaltado que el objetivo central es que Manzur exponga de forma detallada cualquier información relevante sobre su relación con las dinámicas que afectaron a comunidades y víctimas durante el periodo de actuación de los grupos paramilitares.
La comparecencia de Julio Manzur se inscribe en el marco de los compromisos que los comparecientes deben asumir para contribuir efectivamente a la verdad, la reparación y la no repetición. Mientras avanza este proceso, las víctimas mantienen la expectativa de que sus testimonios y aportes permitan construir un relato más completo sobre lo ocurrido en Córdoba y el Urabá, y que este paso ante la JEP contribuya a esclarecer responsabilidades dentro del conflicto armado.




